'Dori', una vida en tus ojos

¿QUIÉN es 'Dori'? 'Dori' es una podenca de ocho añitos. En su pizpireto cuerpo, con tacto aterciopelado y aspecto radiante, guarda una historia, una vida entera en un chenil. Una historia con principio amargo y triste para una perra joven que sin saber el porqué, acaba atada y abandonada en la puerta de un desconocido.

'Dori' llega a nosotros con un año. Desde el primer momento nos enamoró su mirada dulce y fiel en unos ojos color miel brillantes , vivos y llenos de luz que jamás olvidaremos.

Al principio de ser rescatada por 'No me abandones', su actitud era difícil y le costó adaptarse, pero con la seguridad que empezamos a transmitirle los voluntarios, sus compañeros perrunos de fatiga, y con paciencia, 'Dori' se convierte en una más . Se integra en la vida diaria del refugio y empezamos a conocer una cualidad envidiable en ella, ser la primera en el podium de la categoría 'captura de lanzamiento de pelota de tenis desde cualquier punto'. Desde ese momento, y cuando empieza a comprender que su segunda oportunidad está comenzando, cambia su actitud y su vida con nosotros se desarrolla entre juegos , amor, comprensión, esperanza y protección. Pero, a pesar de todo lo que nosotros le ofrecemos, 'Dori' desgraciadamente y teniendo en cuenta su edad y enfermedad, no conoce la entrega de una familia las veinticuatro horas del día que tanto necesita, el calor en invierno bajo un edredón o estufa de una mesa camilla, la calma de una caricia en mitad de la noche cuando suena un relámpago.

Ahora 'Dori' es una perra ciega debido a una enfermedad degenerativa. Su ceguera le supuso acostumbrarse y adaptarse a sus limitaciones y a ver reducida su movilidad. Estaba tristona, la alegría de sus orejas puntiagudas se veía salpicadas de heridas al no orientarse bien y sus patas ágiles y preparadas para alcanzar su pelota se veían reprimidas por miedo a un golpe. Todo esto la iba envejeciendo y apagando a pasos agigantados. El movimiento de su rabo como aspas del ventilador se aflojaba día a día y nos preocupaba perderla para siempre.

Pero milagrosamente su actitud empezó a cambiar. Si no podía ver con sus ojos, tendría que empezar a ver con su olfato y su agudeza auditiva para poder seguir disfrutando de la vida. Actitud que desde ese momento no se ha separado de ella, convirtiéndola en un ejemplo de superación para todos los voluntarios. Es un plus de fuerza para mí misma ver ese gran paso de la resignación a la valentía.

Verla radiante salir de su chenil , sortear obstáculos para rastrear, llegar a tu posición y esperar inmóvil y paciente su merecido abrazo, mover su trasero hasta capturar su recompensa perruna guiada por su hocico avispado y, con el mismo, encontrar el escondite que ella misma usó el día anterior para guardar su ansiada pelota, es sencillamente maravilloso. ¡Ella sí que sabe aprovechar al máximo su tiempo de recreo!

Envidio su fortaleza. Jamás la verás renunciar a los paseos, los intentos de carrera, la rapidez con la que entra en su chenil para llegar hasta su plato de macarrones. Pero la realidad es triste para ella, es dura. Su vida en la protectora, una vida normal dentro de lo que cabe y de sus limitaciones, hasta ahora, está llegando a su fin. Precisa de un tratamiento fundamental y vital para su ceguera, precisa de los cuidados y de una calidad de vida mejor, que solo una casa puede ofrecerle y no encontrar tantos obstáculos físicos que pueden dañarla seriamente.

'Dori', ¿cuándo llegará una familia para ti? Viendo a diario tus ojos de cristal me pregunto ¿por qué tú no?, ¿por qué tú no puedes encontrar un corazón humano que se funda con el tuyo?, ¿por qué , si tanto te lo mereces?, ¿por qué aún sigues en una jaula si ya has conseguido sonreír a la vida a pesar de las dificultades y has sacado el valor suficiente para no terminar golpeada con un árbol, rasgada con un alambre o, aunque parezca muy brusco, muerta de pena en una esquina?

Me entristece ver cómo tus ojos que un día reflejaban juventud y luz se apaguen definitivamente en una jaula . No te lo mereces . No creo que este relato refleje todo lo que eres y lo que me has enseñado. Te has convertido en mi ejemplo propio de superación. Ojalá pudiera cambiar tu historia, llevarte al 'Pozo de Aran', de Carlos Núñez, y devolverte tus ojos miel, tu mirada limpia y disfrutar de tu cuerpo andando sin miedo por el refugio. Pero desgraciadamente no puedo. Te prometo 'Dori' que no me cansaré y no me rendiré hasta que consigas tu verdadera segunda oportunidad viviendo en una casa y donde tu único obstáculo del día a día sea el cojín de un sofá . ¡Suerte pequeña!

PARA ADOPTAR : 675485992 / 660185885

(*Voluntaria de la Asociación 'No me Abandones'. Jerez)