CGT afirma que el Consistorio no está cumpliendo la ley de vertidos

El sindicato CGT denunció ayer que el Ayuntamiento de Jerez está incumpliendo la ley de vertidos debido a los retrasos que se están produciendo en las obras de adaptación y ampliación de la depuradora y a los problemas que presentan algunas de las nuevas máquinas instaladas en el complejo.

Según señala el delegado de personal de la depuradora, José López Llamas, estos trabajos, que tienen un presupuesto de 10,7 millones de euros y que comenzaron hace casi tres años, están dotando a las instalaciones de un depósito nuevo para los lixidiados que llegan de Las Calandrias, se mejorarán los digestores de los lodos -que no se están digiriendo- y los espesadores; también se sustituirán los equipos de pretratamiento, algo fundamental ya que "que en cuanto llueve se producen atascos en la entrada de agua bruta a la depuradora, lo que provoca que el agua vaya al río sin depurar". Así y todo, el delegado de personal afirma que algunas de las nuevas máquinas no funcionan correctamente, lo que provoca dos tipos de problemas. De uno, "un delito ecológico por la deficiente depuración de las aguas residuales" y de otro, "un riesgo a la integridad de los trabajadores". Así, López Llamas afirma que los propios trabajadores han tenido que desatascar las máquinas con sus propias manos. "Lo que no es normal es que una maquinaria que ha estado aquí 18 años haya funcionado correctamente y ahora la nueva tenga problemas, y esto es algo que los propios miembros del Consejo Local de Medio Ambiente han podido observar en las instalaciones".

Otro problema que preocupa al sindicato CGT es el relativo al contrato de la empresa adjudicataria, actualmente Aqualia, al que se le ha prorrogado el contrato mientras duren las obras de remodelación y ampliación. "Nos preocupa, y así lo preguntamos en el consejo local de Medio Ambiente, si se está elaborando un pliego de condiciones para que en el momento que se terminen los trabajos salga publicado con la intención de que puedan concurrir otras empresas. Entendemos que por la vía de urgencia las cosas no se hacen adecuadamente. Exigimos tanto a Ajemsa como al Ayuntamiento que le metan mano a este tema, porque luego nos podemos encontrar con una depuradora a medio terminar y con una serie de problemas medioambientales", señaló el delegado de personal de la planta .

CGT también destacó que los incumplimientos de la ley de vertidos se están produciendo en algunas de las depuradoras más pequeñas que están situadas en las barriadas rurales. Así, según datos de la Consejería de Medio Ambiente relativos al año 2009, presentaban problemas de vertidos incontrolados las de Gibalbín, San Isidro, La Ina, Lomopardo, Los Repostaderos y Cañada del León.

"Queremos que se tomen cartas en el asunto para que los trabajadores y la ciudadanía no seamos los que paguemos estas cuestiones mal llevadas. Lo que queremos es que este servicio se haga con la mejor de las garantías", señala José López Llamas.