Colapso 'histórico' de las Urgencias

Sanidad

La falta de camas en planta obliga a tratar a los pacientes en los pasillos en la madrugada del martes. El hospital dice que fue "una noche complicada".

Pacientes con tratamientos permanecen en un pasillo de Urgencias.
Pacientes con tratamientos permanecen en un pasillo de Urgencias.
M. Valero

30 de noviembre 2016 - 07:06

Jerez/as Urgencias del hospital volvieron a vivir en la madrugada de ayer un colapso total. Hacía años (según profesionales y sindicatos) que no se veía en el servicio a usuario atendidos en sillones colocados en los pasillos, una imagen que pone de relieve la falta de camas en el centro sanitario. A pesar de que las fuerzas sindicales dieron tiempo a la dirección del hospital –dentro del calendario de movilizaciones– para aplicar mejoras, este escenario augura un mes complicado en Urgencias.

“Hoy nos hemos llevado una sorpresa porque desde que decidimos paralizar las protestas la situación iba a mejor poco a poco. Sin embargo, este colapso demuestra la mala gestión de camas del hospital. Para mí es inédito ver personas en camillas y con tratamientos en los pasillos de Urgencias. Lo que ocurrió anoche es un mal índice”, denunció ayer Gustavo Domínguez, delegado de CSIF en el hospital. “Es triste que hasta que no llega la mañana no se empiezan a despejar las plantas para descongestionar Urgencias. Me temo, además, que estos tapones irán a más, puesto que entramos en una época de alta frecuentación y porque, según nos dicen desde la dirección, los problemas en los hospitales Pascual están aumentando las incidencias en Jerez”, añadieron desde el sindicato.

Domínguez remarcó que el colapso se debió “al atasco de los ingresos y las altas, y a la mala gestión de camas. Parece que ya no se sabe cómo salir de este caos, es muy complicado”. “Estamos intranquilos porque ahora vienen las fiestas, un incremento de la asistencia a personas con patologías crónicas y respiratorias, y las vacaciones del personal”, señalaron desde el CSIF. Para este sindicato activar las llamadas camas ‘reservadas’ no es más que “eufemismo”, puesto que estos espacios no cuentan ni con personal ni con materiales para la atención de los usuarios. “¿Qué es una cama reservada? Pues una cama sin nada, una solución pasajera. Desde que paramos las movilizaciones parecía que iba la cosa mejor, puesto que había buenas palabras desde la dirección y sí hemos visto un aumento de la contratación. Pero esto no se puede consentir. No sé si lo de esta madrugada ha sido una excepción o será lo normal –cabe decir que los lunes son días críticos en Urgencias–, pero tener que tratar a la gente en los pasillos no es de recibo”, subrayó Domínguez.

Desde CCOO, Charo Robles también lamentó la situación vivida en el hospital en la madrugada de ayer, informando que tanto las dos salas de tratamiento como las dos de triaje estaban completas, lo que llevó a ‘colocar’ a los pacientes en espacios no habilitados. “Sabemos que la época del año es mala pero también es verdad que este colapso no es normal. Aquí hay un problema, porque no recuerdo que se haya llegado a atender a personas en los pasillos”, indicó Robles. Según pudo conocer este medio, alrededor de las cinco de la madrugada, medio centenar de pacientes esperaban en Observación una cama en planta.

El Sindicato de Enfermería (Satse) también hizo hincapié en que la situación en el servicio de Urgencias “se ha vuelto ya insostenible”. “Desde hace varios días la cantidad de pacientes a la espera de camas ha hecho que este servicio se convierta en un caos, llegando esta noche a permanecer enfermos en sillones para ponerse tratamiento en el pasillo, algo que no se veía desde hace más de 30 años”, denunció el sindicato.

Desde que comenzaron los colapsos, Satse solicitó a la dirección gerencia la cobertura “no sólo de todos los puestos de enfermería habituales de plantilla, sino de aquellas áreas que se habilitan provisionalmente cuando el número de pacientes aumenta, algo que la mayoría de las veces no se hace, sino que el mismo número de profesionales se mueve de una zona a otra, dejando siempre algo descubierto”. Tanto es así que ayer mismo el sindicato recriminó que “ha habido un enfermero menos en el turno de mañana y de tarde, con más de 40 enfermos pendiente de cama y pacientes ubicados en los pasillos por falta de espacio”.

“Las condiciones en la que se está trabajando no son las adecuadas , ni para las enfermeras, aumentando las ratios, con poco espacio..., ni para los pacientes, sin intimidad, largas esperas y muchas horas en sillones, camillas...”, criticó el Satse, añadiendo que debido a la situación “tan grave que estamos viviendo los últimos días, creemos imprescindible habilitar todas las camas disponibles (actualmente la antigua ginecología continua cerrada) para al menos momentáneamente, descongestionar la zona”. De forma paralela consideran que es fundamental trabajar en un plan a medio-largo plazo que ponga solución al origen del problema.

Por otra parte, reconocieron que la dirección gerencia del área “ha comprendido al fin que el número de profesionales de enfermería era insuficiente” y la contratación de enfermeros en el mes de noviembre ha aumentado. Sin embargo, el sindicato denunció “la falta de cobertura que se está produciendo en algunas unidades y no precisamente por causas imprevistas, como ha sido el caso de Urgencias en bastantes ocasiones, la UCI durante el fin de semana y el lunes por la mañana, y el servicio de cardiología durante la tarde de ayer”. En Satse puntualizó que “como siempre hemos dicho no es cuestión de un número u otro, sino de que la situación que han sufrido nuestros pacientes y profesionales no se repita y para ello vamos a seguir vigilando y trabajando”.

Desde el hospital respondieron a las denuncias y a la situación de aglomeración en la madrugada de ayer, reconociendo que “la noche ha sido complicada, pero no se puede denominar ‘colapso’ porque eso implicaría no atender a los pacientes y cerrar la puerta del Urgencias, cosa que, obviamente, no se ha producido”. Informaron que durante la mañana se fue dando “respuesta” y alrededor del mediodía “la situación se ha normalizado: las consultas están tranquilas y hay sillones de tratamiento y camas de observación libres”. De hecho, en vista de la demanda, desde el hospital “se actuó rápidamente y ayer –por el lunes– se dispuso 18 camas que estaban en reserva y contrató a ocho profesionales de enfermería y cuatro auxiliares para atender ese aumento de camas”.

Desde el SAS remarcaron que en los últimos tres días ha subido un 30% la demanda de la asistencia del 061 en la provincia “y eso tiene reflejo en las puertas de Urgencias”.

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