¿Debe seguir Antonio Tejado en prisión?

Antonio Tejado cumple este domingo 70 días en prisión. Han pasado más de dos meses desde aquel 12 de febrero, día en el que el juez decidió enviarlo a la cárcel a instancias de la Fiscalía como presunto "autor intelectual" del asalto al chalé de su tía, que tuvo lugar en la madrugada del 25 de agosto del año pasado. La defensa del sobrino de María del Monte ha vuelto a pedir esta semana su puesta en libertad, alegando que no se dan los requisitos para mantenerlo privado de libertad, al considerar que no hay riesgo de fuga o de destrucción de pruebas, entre otros motivos.

A la espera de la decisión que pueda adoptar el juez de Instrucción número 16 de Sevilla, Juan Gutiérrez Casillas, tanto la Fiscalía de Sevilla como la acusación particular que ejercen María del Monte e Inmaculada Casal se han opuesto a que se acuerde la libertad, aunque la opinión de ambas acusaciones no es vinculante para el juez, que puede optar por dejarlo libre o incluso fijar una fianza tanto para Antonio Tejado como para los otros investigados que siguen presos.

No obstante, fuentes del caso apuntan que el instructor del caso no es muy partidario de la imposición de fianzas, es decir, que en el supuesto de que decida la libertad provisional podría adoptarla sin fijar ninguna cuantía. Otra cosa es que se establezcan las habituales comparecencias en el juzgado de forma periódica, lo habitual es cada 15 días, o incluso algún tipo de protección para las víctimas, como la prohibición de acercarse o comunicarse con María del Monte e Inmaculada Casal mientras continúa el proceso judicial, a la espera de juicio.

En cualquier caso, el magistrado debe analizar si en el caso de Antonio Tejado, el boxeador ruso Arseny Garibyan y los otros cuatro investigados que siguen presos se mantienen lo fines previstos en la ley para que sigan en prisión. Los fines que persigue la prisión provisional, de acuerdo con el artículo 503 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, son los de "asegurar la presencia del investigado o encausado en el proceso cuando pueda inferirse racionalmente un riesgo de fuga"; así como "evitar la ocultación, alteración o destrucción de las fuentes de prueba relevantes para el enjuiciamiento"; y "evitar que el investigado o encausado pueda actuar contra bienes jurídicos de la víctima".

Lo cierto es que después de 70 días en prisión, el posible riesgo de fuga o de destrucción de pruebas es prácticamente inexistente, según apuntan fuentes del caso consultadas por este periódico. De hecho, la instrucción de la causa está muy avanzada y sólo queda que la Guardia Civil analice la información de los diez teléfonos móviles intervenidos durante la operación policial en la que fue detenido Antonio Tejado.

La Fiscalía sostuvo recientemente, cuando pidió que el sobrino de la cantante siguiera en prisión, que esta diligencia resultaba "fundamental" para el completo esclarecimiento de los hechos y estimaba que posiblemente podría suponer una "aportación de nuevos indicios respecto a la totalidad de los encartados, confirmando así las sospechas y por lo tanto la gravedad de los hechos y la implicación en los mismos de los investigados".

Esos teléfonos están ya desde el arresto de los implicados en manos de los investigadores de la Guardia Civil, a los que el juez autorizó recientemente a realizar el volcado de la información contenida en esos dispositivos -mensajes de texto, fotografías, etc.-, con lo que el riesgo de destrucción de pruebas es prácticamente nulo.

En cuanto al botín del robo, los relojes y joyas valorados en un millón de euros, también es muy difícil que aparezcan por el tiempo transcurrido, máxime teniendo en cuenta, como afirman los investigadores, que un primer lote de ese botín se vendió la misma tarde del robo por 48.000 euros.

La Guardia Civil recogía en su atestado algunas intervenciones telefónicas en las que los implicados bromeaban y se jactaban de que estaban manipulando las joyas: "Aquí estoy quitando las piedras, ¿no estás escuchando los porrazos?", afirmaba uno de los investigados en uno de los pinchazos.

El juez denegó la libertad ante los "claros indicios" de la participación de Tejado en una "organización criminal" que está siendo investigada por el asalto al chalé de su tía, recordando además la gravedad de los hechos que se atribuyen a esta banda, al tratarse de un "robo violento peligroso".

El juez advertía asimismo de que hay que "garantizar la integridad y tranquilidad de la propia situación personal de las víctimas" y también "protegerlas" de "cualquier conducta futura por parte del inculpado Antonio Tejado. Se tiene aquí en consideración el hecho de que el actual domicilio de tales perjudicadas es perfectamente conocido por el acceso a las actuaciones de todos los imputados en esta causa", aseveraba.

Conforme pasan las semanas, Antonio Tejado y los otros cinco investigados están un paso más cerca de lograr la libertad provisional, con independencia del juicio al que tendrán que someterse cuando concluya la instrucción. Si no accede ahora el juez, tendrán otra oportunidad ante la Audiencia de Sevilla, a través de un recurso de apelación.