Economía niega que privatizar empresas públicas esté en sus planes

La Junta no tiene entre sus planes seguir los pasos privatizadores del Gobierno central para lograr recursos manteniéndose dentro de los márgenes del déficit fijado para 2011 (1,3% del PIB). No lo tiene previsto en su agenda política, porque, como explicó ayer en comisión parlamentaria el consejero de Economía, Antonio Ávila, las empresas públicas no se van a tocar porque se han creado para prestar servicios. Cosa bien distinta es la operación de salida del accionariado de sociedades a cuyo capital social la Junta se incorporó para su rescate, y que en ningún caso es para el Gobierno andaluz una privatización, porque "nunca" pueden ser consideradas como empresas públicas al ser una aportación puntual.

Así, a pesar de que el Ejecutivo central haya abierto las puertas al capital privado en la explotación de los aeropuertos de Barajas y El Prat, y de Loterías del Estado, Ávila situó a la Junta en el lado opuesto: en el de defensor de lo público, y, en todo caso, como "motor de lo privado en todo aquello que ayude a reforzar el tejido productivo".

La explicación de Ávila satisfizo a IU, cuyo portavoz en esta comisión, Pedro Vaquero, mostró su preocupación por los "rumores" sobre procesos de privatización, a través de la agencia Idea y de su filial de capital riesgo Invercaria, de algunas compañías participadas mayoritaria y minoritariamente por la Junta. Todo lo contrario que el PP, que quiso entrar en un debate sobre si son los socialistas o los populares los más proclives a la privatización, y que Ávila rehuyó negando la mayor: no se puede discutir de privatizaciones si estas no existen.

Apoyándose en el informe de la Cámara de Cuentas del ejercicio 2008 sobre la fiscalización de la Junta, el portavoz popular en esta comisión, Salvador Fuentes, insistió en que la compraventa de acciones sí son privatizaciones, y aun en caso de que no fueran consideradas como tales, recriminó al Gobierno andaluz su escasa transparencia en esta materia. Un ocultismo que achacó a que el PSOE se quiere erigir en "defensor de lo público", cuando "desde hace tiempo vienen enajenando acciones", y mientras cuelgan el "sambenito" a los populares por su afán privatizador.