La Junta da por hecho que recibe 600 millones al margen del rescate

La Consejería y el Ministerio de Hacienda retomaban ayer las negociaciones sobre los 600 millones que están pendientes de ingresarse en las arcas autonómicas, con la duda despejada de que este dinero que falta para completar los 1.000 millones demandados como anticipo por la Junta no estará vinculado a la solicitud del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA). Se recibirá mañana, y ya más adelante ambas administraciones verán si se acaba restando o no de la cantidad final de este fondo que conceda el Gobierno al Ejecutivo andaluz -ya se ha calculado el rescate en 4.908 millones, pero no se ha formalizado la petición-, y por tanto, si se pagan intereses por ese montante.

La consejera de Presidencia e Igualdad, Susana Díaz, garantizó que antes del viernes llegará esta partida de 600 millones -tal y como había previsto el pasado lunes el presidente andaluz, José Antonio Griñán, tras confirmarse la primera tanda de 400 millones- y que "no están condicionados" a la petición del FLA. "Antes del día 5, la Junta no va a pedir el FLA y sí van a llegar esos 600 millones antes del día 5", subrayó.

Lo importante para la Junta es tener liquidez y cuanto antes, y los dos pagos de esta semana por parte del Gobierno así lo garantizan. El martes ya se ingresaron 400 millones, que irán destinados al pago a proveedores -a aquellos que quedaron fuera del plan de pago a proveedores del pasado mes de abril-, y está prevista una segunda inyección para mañana de los 600 restantes, que servirán para afrontar el vencimiento de deuda concidiendo con que su plazo expira. Por esta necesidad urgente de dinero es por lo que la Junta ha querido ser prudente durante toda la negociación y no explotar la teoría del agravio y la discriminación -ese papel se lo ha dejado casi en exclusiva a IU, como socio de Gobierno, y al PSOE-. Los 1.000 millones estaban solicitados como adelanto de la Participación de Ingresos del Estado (PIE), como así hicieron con anterioridad Cataluña (1.800 millones) y Valencia (1.400 millones) y que los recibieron al completo, mientras Andalucía sólo recibirá 400 millones por este concepto.

Desde el principio, a la Junta no le gustó la idea del titular de la cartera de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que "buena parte" de este anticipo de la PIE se canalizara a través del FLA porque conllevaría el pago de unos intereses. Pero parece que no hay muchas opciones, a la vista de que el Ministerio también está a cero. El anticipo de la PIE; aunque sea un derecho de la comunidad, no puede salir de la caja estatal por la sencilla razón de que no hay recursos, mientras que de acudir la Junta al FLA quien da el dinero directamente no es el Gobierno, sino que es la banca -de los 18.000 millones con los que estará dotado el fondo, 8.000 los pondrán las entidades financieras, otros 6.000 millones son un préstamo de Loterías del Estado, y el Tesoro Público pondrá directamente de su caja 4.000 millones-.

Esa sería la explicación que cuadraría con los virajes en el discurso que ha habido las últimas semanas en el Ejecutivo autonómico. En quince días ha pasado de criticar, incluso en sede parlamentaria, que a Andalucía no se le diera nada de este anticipo de 1.000 millones, a decir que ya no importa tanto si se paga como anticipo o como adelanto del FLA. Griñán ya dijo bien claro tras la Conferencia de Presidentes del martes que "da lo mismo" porque ambos son préstamos -aunque lo primero es a coste cero y el segundo implica intereses-. En realidad, lo que importa es recibir dinero sea como sea. Y así lo resumió la consejera de Presidencia: "Que al final hay que sumar las cantidades, lógicamente, pero el resultado final tiene que ser que la Junta obtiene la liquidez que necesita para poder hacer frente tanto a la deuda financiera como al pago a proveedores".

Al desvincularse esta segunda entrega de dinero de la solicitud del FLA por parte de la Junta, como así quería el Gobierno central, ya no existe la presión del calendario y ese 5 de octubre que marcada como tope el vencimiento de deuda, porque ya hay dinero de sobra para cubrirlo. La Junta y el Gobierno tienen ahora más margen para hablar con calma del FLA, y Díaz aseguró que se sigue dialogando con Montoro las condiciones para acogerse a este fondo, pero que ya no se pedirá antes del fin de semana, aunque la decisión de acudir al rescate no se pospondrá demasiado en el tiempo.

Lo que tampoco quiere la Junta es que, como ya sucediera con los anticipos, el FLA se convierta en una suerte de carrera entre comunidades. Pero por si hubiera que ir adelantando posiciones, Díaz recordó que este fondo, gracias a la intervención andaluza, se ha abierto al pago a proveedores y no servirá sólo para afrontardeuda financiera, como estaba previsto en un principio, y dejó caer que la deuda andaluza es un 50% de la que tiene Cataluña.