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¿De qué lado está la presidenta de la Junta, de la acusación o de la defensa? Esta es la pregunta que se hace el PP, que conminó ayer a Susana Díaz a que se decante en el procedimiento judicial por los ERE fraudulentos. La vicesecretaria de Territorio, Medio Ambiente y Asuntos Europeos del PP-A, Alicia Martínez en Andalucía, criticó que Díaz ha asegurado con reiteración que será implacable contra la corrupción "pero de momento solo están siendo implacables contra la juez Alaya".
La diputada del PP criticó que la presidenta, califique de "injusto" el último auto de Alaya. "Si tan claro lo tienen, que recurran el auto y denuncien a la juez", retó Martínez. "Es increíble que el PSOE ponga en tela de juicio el trabajo de la juez, que es la que ha ido destejiendo el hilo de la corrupción en la Junta", dijo la parlamentaria popular, para a continuación acusar a los socialistas de que "lejos de luchar contra la corrupción se debaten contra la legalidad del auto".
Esta actitud es "incompatible con el discurso de ser implacable contra la corrupción", insistió Martínez, para quien "es evidente que Griñán y Chaves están implicados, y por eso se han ido nombrando sucesores". "La única manera de romper con la corrupción es colaborando con la Justicia", exigió Martínez.
A juicio de la dirigente del PP andaluz, la Fiscalía Anticorrupción "no ha cuestionado la actuación" de la juez ni la ha "apremiado" para que eleve el caso al Tribunal Supremo, sino que "simplemente" le ha pedido que "motive mejor" su auto.
Su compañero de partido, el secretario general, José Luis Sanz, llamó a Chaves y Griñán "imputados vip" porque "ya estaban aforados" y "tienen un trato especial" en base al artículo 118 bis de la Ley de Enjuiciamiento Civil. Sanz también invitó a los ex presidentes a "denunciar" a la juez si, como han dicho públicamente, "tan mal y con tantas lagunas" ven el auto en el que Alaya los "imputa".
"Si han insinuado incluso que puede haber prevaricación por parte de la juez, ¿por qué no denuncian a la jueza en un juzgado también? Está en su mano hacerlo", dijo Sanz tras señalar que "quien está mareando la perdiz" con el auto de Alaya y quien está "intentando distraer y confundir" a los andaluces haciendo valoraciones e interpretaciones jurídicas sobre si Chaves y Griñán están imputados formalmente o no es el PSOE-A y no el PP-A.
Por su parte, el coordinar general de IU en Andalucía, Antonio Maíllo, pidió ayer a la juez "que impute o no impute, pero que se aclare", señalando que el último auto, "desde luego, no lo aclara". "Si tiene que imputar que impute pero que lo haga ya", apostilló el dirigente la formación de izquierdas. Como ha hecho en ocasiones anteriores, Maíllo insistió en que "la justicia tiene que llegar hasta el final, caiga quien caiga, y las responsabilidades se tienen que dirimir". El coordinador de IU-CA reiteró que "pedimos dos cosas: celeridad, porque la sociedad andaluza tiene que saber cuanto antes que ocurrió con ese escándalo y esas prácticas, y claridad".
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