Notas al margen
David Fernández
El problema del PSOE-A no es el candidato, es el discurso
El Partido Popular e Izquierda Unida retomaron en diciembre las conversaciones encaminadas a formar una coalición en el gobierno municipal de La Línea, gestionado por la alcaldesa socialista Gema Araujo en coalición con el PA. La fórmula sería la presentación de una moción de censura.
Para este pacto necesitaría un concejal independiente, lo que se da por hecho por en el seno del PP, ya que este edil concurrió a las últimas elecciones por este partido y se distanció por discrepancias con el entonces número uno de la formación, Alejandro Sánchez, que desde que fue nombrado director del gabinete del Secretario de Estado de Seguridad permanece ajeno a la política local.
Una vez restablecida la unión en el PP, la opción ideada por el presidente provincial, Antonio Sanz, era descabalgar de la alcaldía a la socialista Gemma Araujo, por cuanto entendían que estaba llevando la ciudad a un callejón sin salida.
En octubre PP e IU mantuvieron reuniones extraoficiales. Esas relaciones han ido caldeándose con el paso del tiempo y han alcanzando su punto más alto en las tres últimas semanas.
En el mes de diciembre se han producido dos encuentros entre los partidos que analizan la posibilidad de dar un giro radical a lo que resta de candidatura.
Al primero, que se convirtió en una exposición de voluntades, acudieron los dos concejales de la formación de IU, Ceferina Peño y Javier Menéndez, así como los dos máximos responsables populares en estos momentos: Eloy García Moreno y José Antonio Fernández Pons. El pasado jueves día 27 se produjo una nueva reunión.
Una y otra parte han quedado citados para la próxima semana y la finalidad no es otra que conseguir una postura común que obligue a que la vara de mando municipal cambie de manos, a ser posible, antes de que finalice el primer trimestre del presente 2013.
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