El PSOE andaluz desconfía de la alianza con Podemos

Si hasta el viernes pasado, buena parte de la militancia socialista andaluza quería un Gobierno de Pedro Sánchez sustentado en el apoyo de Podemos, la actuación estelar de Pablo Iglesias en la rueda de prensa de ese día y su detallada propuesta para un Ejecutivo mixto ha levantado todo tipo de recelos. Ésta es la opinión de uno de los miembros de la dirección del PSOE andaluz, cuyo número dos, Juan Cornejo, expresó ayer el punto de vista de la cúpula. "Antes a la oposición que perder nuestra identidad", indicó el hombre de Susana Díaz en el partido. "El Gobierno no es la prioridad", señaló. Los socialistas andaluces no van a tolerar que su secretario general, Pedro Sánchez, negocie sobre la "unidad" de España y la "igualdad" de los españoles; esto es, que no aceptarán que Podemos lleve a la mesa de negociación ni el referéndum de independencia ni el derecho a decidir. Y mucho menos que esto sea impuesto por ERC o DiL, los dos partidos independentistas catalanes que ayer se expresaron con claridad: si no hay apoyo al referéndum, ni siquiera se abstendrán en la investidura de Sánchez. En Comú Podem, la marca catalana de la formación, se pronunció en los mismos términos por boca de su portavoz Xavier Doménech y de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

Y, por si fuese poco, Pablo Iglesias afirmó en una entrevista radiofónica que "el café para todos" está superado; es decir, que según Podemos hay que establecer diferencias entre comunidades en función de su historia y de su acervo cultural. "El ministerio de plurinacionalidad debe ser el ministerio de los ricos", contestó Cornejo a la propuesta de Iglesias.

El portavoz de En Comú Podem, Xavier Doménech, lamentó que en las conversaciones entre el PSOE y Podemos no se haya comenzado a negociar y acusó a Susana Díaz de ser quien pone líneas rojas al exigir la renuncia al referéndum. En una rueda de prensa junto a la alcaldesa de Barcelona, el secretario de la mesa del Congreso, Marcelo Expósito, recordó a Díaz que ellos no ponen líneas rojas antes de sentarse a hablar, y que "si el PSOE tiene una propuesta que puede convencer al conjunto de la ciudadanía de Cataluña que la presente" .

A la vista de cuál ha sido el resultado, la propuesta de coalición de Pablo Iglesias parece que nacía, precisamente, para provocar el rechazo de los socialistas. El líder de Podemos no la comunicó a Sánchez antes de exponerla ante la opinión pública y justificó la presencia morada en el Gobierno porque, de otro modo, no se fiarían del PSOE. Algunos ex dirigentes como Alfredo Pérez Rubalcaba y Eduardo Madina dijeron haberse sentido humillados por ello. Juan Cornejo lo explicó así: "Me sentiría humillado si se negociase con esas condiciones; esto no son formas de acercarse a un partido para negociar, más bien es para romper, para reventar (…) Iglesias está pasado de soberbia y de prepotencia".

De este modo, el recelo de la dirección socialista andaluza con Podemos es manifiesta. No quieren tenerlos en el Gobierno, pero es que, además, algunos miembros de la Ejecutiva tampoco creen que Pedro Sánchez pueda armar una mayoría con Podemos, el voto del PNV y el apoyo pasivo de ERC y DiL. Ni lo ven posible ni lo creen conveniente.

Juan Cornejo defendió con claridad que el acuerdo al que pueda llegarse con otras fuerzas políticas deberá pasar por el acuerdo del comité federal. En eso choca con una opinión expresada por el secretario de Organización, César Luena, que sostuvo que no era necesario puesto que el comité ya ha marcado las líneas para la negociación. En su opinión, no debe haber un filtro antes y también, después, pero el caso es que, como creen los andaluces, la propia negociación altera el acuerdo, de ahí que sea necesario ir al comité federal.

Los socialistas mantienen la reunión del comité federal para el próximo sábado, día 30. El orden del día es el de decidir la fecha del congreso, aunque también se hablará del escenario de los acuerdos. Todo está muy en el aire, debido a que el viernes se podrá saber a quién encarga el Rey la formación del Gobierno, una vez que Rajoy se ha apartado. Si no es así, el comité estará igual de condicionado. Fuentes socialistas sí explicaron que Pedro Sánchez se reunirá con los barones territoriales, uno a uno, antes del comité del sábado. Las secretarías regionales están a la espera de que Ferraz les comunique el orden del día.