Vox confirma la enmienda a la totalidad a los Presupuestos de la Junta de Andalucía

Vox mantiene el órdago de la enmienda a la totalidad al proyecto de Presupuestos de la Junta para 2019. El lunes, cuando la anunciaron, esperaban un "gesto". Santiago Abascal, después, aseguró que su postura era "negociable". Elías Bendodo, por su parte, respondió que una enmienda a la totalidad "reduce los márgenes de la negociación". Pero ese será el escenario de las conversaciones entre el bipartito de PP y Ciudadanos y su socio parlamentario: habrá una propuesta de devolución de las cuentas en el registro del Parlamento.

La formación que dirige Francisco Serrano ha adelantado este miércoles que mañana, una hora antes de que acabe el plazo, llevarán al registro la enmienda a la totalidad. Adelante Andalucía y el PSOE harán lo mismo, pero la iniciativa de Vox es la más llamativa. Mucho tienen que cambiar las cosas para que aprueben las primeras cuentas no socialistas de la Junta.

El Gobierno dice, públicamente, que confía en convencer a "la tercera pata del cambio", como Bendodo definió a Vox en su momento. De hecho ese es su principal argumento. Ese y dejar claro que el naufragio de sus primeros Presupuestos depende de que Vox vote en el mismo sentido que el PSOE y Adelante Andalucía.

Fue Francisco Serrano, líder de la formación en Andalucía, quien explicó cuál es el problema de Vox con estos presupuestos. Son "continuistas" y mantienen la financiación para lo que ellos consideran "chiringuitos ideológicos": las entidades memorialistas y las de igualdad. Las cuentas diseñadas por Juan Bravo mantienen el presupuesto en igualdad y rebajan sólo en 100.000 euros el dinero de la Memoria Histórica.

Sin embargo, ninguno de los portavoces de Vox ha hecho reclamaciones concretas. No han pedido eliminación de partidas o aumento de otras. "Los Presupuestos no tienen espíritu de cambio", dijo el portavoz del partido, Alejandro Hernández. El diputado cordobés negó que la posición de su partido esté relacionada con la situación estatal y la pugna que mantienen Vox y Ciudadanos en los pactos municipales y autonómicos.