Los universitarios no volverán a las facultades este curso

Los universitarios andaluces no volverán a clase en lo que queda de curso. Así lo han decidido el consejeor de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco; y los rectores de las diez universidades andaluzas, entre las que se encuentran la de Sevilla (Miguel Ángel Castro) y la Pablo de Olavide (Vicente Guzmán).

En dicho encuentro se ha decidido mantener toda la docencia en formato on line -como se viene haciendo desde que se decretó el estado de alarma, que obligó al cierre de los centros educativos- durante lo que resta del presente curso académico.

También se ha acordado preparar, con la mayor celeridad posible, "un marco general de contingencia", que cada universidad puede adaptar posteriormente, para determinar la forma de proceder respecto a las prácticas que no puedan desarrollarse de manera on line. Este marco también serviría para la evaluación, guías docentes, adaptación del calendario académico y desarrollo de TFG y TFM.

La reunión -por videoconferencia- se ha cerrado con el compromiso del consejero y de los rectores de lograr la coordinación y adoptar las mejores soluciones para garantizar el desarrollo del curso 2019/20.

En este aspecto, conviene recordar que la Selectividad ya fue aplazada y se convocará a primeros de julio. Queda por concretar los días exactos de su celebración.

Plataformas digitales en la UPO

Sobre la formación on line que los estudiantes están recibiendo desde que se decretó el estado de alarma, el vicerrector de Estudiantes de la UPO, Antonio Herrera, explica que en esta universidad "estamos utilizando unas plataformas que se llama' BlackBoard' y 'BlackBoard Collaborated' que permiten a profesores y alumnos continuar con las clases de manera on line. Toda nuestra actividad continúa. Los horarios de las asignaturas se están manteniendo y el alumno sabe que si se conecta, ahí estará su profesor", explica Herrera, que destaca la actitud participativa de los estudiantes.

"Los alumnos están más participativos que nunca y exigen mucho más a sus profesores. Estamos todos muy contentos con el resultado dadas las circunstancias. El 100% de las clases se están desarrollando y no hemos recibido ninguna petición por parte de los alumnos de modificar el calendario de exámenes", comenta el vicerrector.

La UPO ya estaba preparada por si los estudiantes no podían volver a las aulas. "Estamos buscando fórmulas para que los exámenes no sean presenciales si es necesario, como por ejemplo, exámenes orales, trabajos o exámenes tipo test. Hay que tener en cuenta que en nuestra universidad apostamos por la evaluación continua y el examen tradicional tiene un peso reducido en la nota final", detalló Herrera.

Teletrabajo en la US

La comunidad de la Universidad de Sevilla también está estos días conectada al teletrabajo. Según apuntan desde la Hispalense, se ha registrado un notable aumento en el uso de las herramientas que permiten a sus miembros estudiar, impartir docencia y realizar otras labores administrativas propias del funcionamiento habitual de la institución.

Los cursos dados de alta por el personal docente en la plataforma virtual de la US suman ya 5.691, según datos del 17 de marzo. Tres días antes, el sábado 14 de marzo, coincidiendo con la declaración del estado de alarma, los cursos registrados eran 4.118.

También ha aumentado el número de usuarios que acceden al espacio de enseñanza virtual de la Universidad de Sevilla. A principios del mes de marzo, los accesos en días laborables oscilaban entre los 48.000 y 56.000. El lunes 16 de marzo se alcanzaron los 83.733 accesos, mientras que el martes día 17, la cifra fue de 88.577.

Exámenes virtuales en la Loyola

Por su parte, la Universidad Loyola Andalucía, la única privada en la comunidad autónoma, continuará con la enseñanza virtual de sus alumnos hasta que finalice el curso. Así lo ha decidido este jueves su consejo de gobierno, según ha informado a Diario de Sevilla el rector de esta institución, Gabriel Pérez.

El rector de la Loyola ha incidido en la distinción entre clases on line y enseñanza virtual, al asegurar que ésta se desarrolla con los mismos horarios y formas que en las aulas a través de videoconferencias, "lo único que cambia es el espacio físico", apostilla. "Queremos alterar lo menos posible lo que teníamos previsto el segundo cuatrimestre", abunda Gabriel Pérez.

Para hacer esta enseñanza virtual posible, desde la Loyola se usan plataformas y medios tecnológicos propios, de ahí que sean posibles exámenes también con presencia virtual. Esta universidad cuenta con dos sedes andaluzas: la de Córdoba y Sevilla. En ésta última estudian 2.000 personas que asisten estos días a clase con su horario habitual gracias a dicha modalidad.