La inversión privada en la parcela de Altadis rondará los 100 millones

La firma de la compra del suelo del antiguo suelo de Altadis por parte de la Zona Franca, que se efectuará el próximo jueves, va a dar alas al Consorcio gaditano y, sobre todo, va a facilitar la llegada a la capital de nuevas empresas privadas, con lo que ello supone de creación de empleo. La operación supone meter de lleno en el sector productivo a 130.000 metros cuadrados de suelo que desde hace años tenían un nivel productivo muy escaso, en una ciudad con una alta tasa de desempleo que hace tiempo que no acoge a nuevas industrias.

A la inversión ya conocida realizada por la Zona Franca para la compra de este suelo, 37,6 millones de euros, se le unirá el dinero que van a poner las empresas que van a instalarse en este terreno. El Consorcio está cerrando las negociaciones con dos o tres firmas, como confirmó en su día el delegado de la Zona Franca, Jorge Ramos, cuyos nombres se conocerán en breve plazo. La previsión es que estas compañías generen una inversión de unos 100 millones de euros y que creen entre 500 y 600 empleos directos en su primer año de gestión. La intención de Ramos es agilizar al máximo la firma de los contratos para, a su vez, evitar retrasos en la llegada de estas nuevas empresas, lo que podría producirse a lo largo de este mismo ejercicio.

En declaraciones a Diario de Cádiz, Jorge Ramos reconoció que las negociaciones con Imperial Tobbaco, la propietaria de Altadis, habían sido largas y complicadas, al igual que todo el proceso de tasación del suelo teniendo en cuenta que éste siempre ha sido caro en la ciudad. Hay que tener en cuenta que no solo se cuenta el suelo, 130.000 metros cuadrados, sino que la compra incluye todos los edificios que componían la fábrica de tabacos (oficinas y naves industriales) y algo de la maquinaria. Cabe la posibilidad de que algunas de las empresas que llegarán a la ciudad para ubicarse en esta parcela aprovechen una parte de estos inmuebles.

"Ha sido una tarea muy ardua, pero la cosa era hacer las cosas bien. La cuestión era buscar más suelo para crecer pero, a la vez, negociar con empresas para ocuparlos", destaca Ramos que reitera su apuesta: que en el plazo de tres o cinco años "la Zona Franca de Cádiz se haya convertido en el primer polo de desarrollo económico de la provincia. Si hoy, con el suelo que tenemos, generamos un movimiento de 400 millones de euros al año, en este tiempo, creciendo hasta 1,3 millones de metros cuadrados (en Cádiz, Jerez, Los Barrios, La Línea y los proyectos de Las Aletas), podremos generar hasta los 1.500 millones de euros por ejercicio".

Considera Ramos que operaciones como las que se van a emprender en los terrenos en Altadis y el propio proceso de expansión de la Zona Franca por toda la provincia, "suponen los primeros pasos para completar un renovado tejido productivo. Hay que tener en cuenta que incluso en los mejores periodos económicos, la provincia siempre está diez puntos por debajo de las tasa de empleo en todo el país. Se carece de una pequeña y mediana empresa que sirva de apoyo al desarrollo de los grandes sectores de producción, y ahí estará el papel de la Zona Franca".

"Si somos capaces de culminar con éxito todo este proceso de expansión, estaremos ayudando a sacar adelante a la provincia. Es mi idea que el Consorcio recupere su propósito inicial de ser motor de la economía gaditana. Y junto a nuestro esfuerzo, la provincia necesita despertar vocaciones empresariales a la vez que se atraen empresas de fuera. Para conseguir esto último tenemos la ventaja de nuestra ubicación, a lo que se une las ventajas que se ofrecen desde la Zona Franca en cuanto a ser un recinto fiscal y aduanero, con todo el ahorro económico que ello supone para las empresas que decidan abrir aquí", concluye Jorge Ramos.