Alerta defensiva: tres goles en el debut
Krasnodar/El debut con empate contra Portugal rearmó a la selección española en casi todos los sentidos, pero encendió de nuevo la alerta defensiva, con diez tantos encajados en sus últimos cuatro partidos mundialistas, en contraste con los dos únicos que recibió cuando fue campeón en 2010.
Los tres goles de Cristiano Ronaldo, uno de penalti y otro de falta bastante dudosos ambos, hicieron vulnerable atrás a España en su estreno, al margen de dos contragolpes que Guedes erró en la culminación.
Mientras aguarda las dos citas frente a Irán y Marruecos, es llamativo ese dato, pues España, desde la Eurocopa 2016 hasta ahora, sólo había recibido tres tantos en un solo encuentro, el amistoso contra Rusia del 14 de noviembre de 2017 (3-3). Por contra, ha resuelto sin un solo daño en su portería 11 de sus 21 choques más recientes.
Además, entre los tres duelos disputados en Brasil 2014, las derrotas ante Holanda (1-5) y Chile (2-0) y la victoria frente a Australia (3-0), y el jugado hasta ahora en Rusia 2018, España ha encajado diez tantos en sus últimos cuatro encuentros en el torneo.
Un aviso indiscutible en una competición en la que es un aspecto fundamental para cualquier equipo que pretende ser campeón, como lo fue en el Mundial de Sudáfrica 2010 para España, que sorteó la fase de grupos con apenas dos goles en contra, el 0-1 en la derrota ante Suiza y el de Chile en el triunfo español (2-1).
Entonces, España completó su éxito con cinco de sus partidos con la portería a cero, incluidas todas las eliminatorias, ganadas por la mínima: 1-0 a Portugal en los octavos de final, 0-1 a Paraguay en cuartos, 1-0 a Alemania en las semifinales y 0-1 a Holanda en la final ganada en la prórroga en el Soccer City.
Fue su mejor Mundial por el desarrollo y, sobre todo, por el desenlace. Y también por el rendimiento defensivo sobre el que sustentó su triunfo final, con una zaga formada por Sergio Ramos, Piqué, Puyol y Capdevila, de la que continúan los dos primeros.
La historia de la Copa del Mundo también habla de la transcendencia defensiva de cada campeón. En el fútbol moderno, en los últimos seis Mundiales, ningún ganador del torneo superó los cuatro goles en contra. Ni Alemania, con cuatro en 2014; ni España, con dos en 2010; ni Italia, con dos en 2006; ni Brasil, con cuatro en 2002; ni Francia, con dos en 1998; ni Brasil, ganadora en Estados Unidos 1994 con tres goles recibidos.
Antes sí hubo campeones del mundo con registros defensivos más altos, por encima de todos la Alemania que triunfó en Suiza 1954 con 14 goles en contra, ocho en un mismo partido -la derrota por 8-3 frente a Hungría-, pero también con 25 tantos a favor, o la Brasil de 1970 que se impuso en el torneo con siete goles encajados; otros tiempos incomparables con el presente y con los sistemas actuales.
No hay comentarios