El Barça parte de cero Las urgencias del Atlético se topan con las dudas del Sevilla

Después de una corta pausa para saborear el mejor año de la historia del club, el Barcelona se pone hoy en marcha en 2010 con el elevado listón de los seis títulos como referencia y con un examen exigente ante el Villarreal.

Pep Guardiola se esfuerza por mantener alta la motivación de sus pupilos, por convencerlos de que el triunfal pasado es ya sólo un recuerdo, historia. El regreso antes de tiempo de jugadores como los brasileños Daniel Alves o Maxwell y el mexicano Márquez tras las vacaciones deja claro que la ambición continúa intacta. "Hicimos algo imposible de superar", admitió el lateral derecho al hacer balance de 2009. Pero ahora es tiempo de ponerse nueva metas, de hacer propósitos de cara a los próximos 365 días. "Esperemos poder completar un ciclo", deseó Iniesta, que quiere que la racha de éxitos se mantenga varias para marcar una época.

El conjunto azulgrana es el rival a batir. Cada partido volverá a ser un examen, empezando por éste ante el renacido Villarreal, que ha olvidado su mal inicio de temporada, ya es noveno en la tabla y que, como el Barcelona, apuesta por un fútbol ofensivo.

Guardiola sabe que cuantos más triunfos consigue su equipo, más cerca está de perder. La cuestión es demorar al máximo la caída. Pero los obstáculos crecen: a la resaca navideña, se suma un duro rival y las bajas de Toure y Keita, que ya preparan con sus selecciones la Copa de África.

Además, Messi se incorporó ayer a los entrenamientos y su presencia parece prematura, al menos durante los 90 minutos, y más conociendo el mimo con el que Guardiola lo cuida. Con Iniesta aún renqueante de la lesión sufrida en el Mundial de clubes, el técnico se verá obligado a recurrir a los jóvenes de los equipos inferiores para cubrir un centro del campo despoblado, con la esperanza de que la jugada tenga el mismo éxito que con Pedro, revelación de la temporada. Márquez o Piqué podrían pasar a reforzar la medular hasta el regreso de Toure y Keita.

Con el Real Madrid, que juega mañana en Pamplona, a sólo dos puntos, el Barça no tiene margen de error. Y por si fuera poco, los azulgrana afrontan un cargado calendario con la Copa del Rey frente a un Madrid ya eliminado.

El Barça, que ha renunciado de momento a fichar, contará al menos con el refuerzo de Gabi Milito, recuperado de una grave lesión de rodilla que lo ha tenido sin jugar durante año y medio.

ALINEACIONES PROBABLES

Barcelona: Valdés, Alves, Puyol, Chygrynskiy, Abidal, Xavi, Piqué, Busquets, Pedro, Ibrahimovic y Henry.

Villarreal: Diego López, Javi Venta, Marcano, Godín, Capdevila, Senna, Bruno, Cani, Cazorla, Rossi y Nilmar.

Árbitro: González Vázquez (gallego).

Estadio y hora: Camp Nou (20:00).

Los rojiblancos enfrentarán su urgencia de victorias, con dos puntos de ventaja sobre el descenso, contra las dudas del equipo andaluz, que sólo ha ganado uno de sus últimos cuatro choques de Liga. El partido llega marcado por las ausencias ofensivas de ambos equipos. En el Sevilla no estarán ni el brasileño Luis Fabiano, lesionado, ni el malí Frederic Kanouté, con su selección, mientras que el Atlético tiene la importante baja del argentino Kun Agüero, aún no recuperado de una microrrotura fibrilar en el abductor. El 10 rojiblanco, máximo goleador del Atlético en esta campaña de Liga, ha avanzado en su recuperación durante la semana, pero no ha llegado a tiempo para el encuentro de mañana, al igual que Pablo Ibáñez, con una contractura en los isquiotibiales. El checo Tomas Ujfalusi y Juanito Gutiérrez, además, son baja por sanción.

Todas esas ausencias obligarán al entrenador a variar su once habitual, también en ataque, donde el uruguayo Diego Forlán estará acompañado por José Manuel Jurado o Maxi Rodríguez como segundo punta.

Jiménez tiene la duda del portero Andrés Palop, que se lastimó una rodilla en el entrenamiento del jueves. Además, no podrá contar con Kanouté ni con el marfileño Zokora, en la Copa de África. Y Luis Fabiano sigue con su puesta a punto .