De La Constancia a El Portal y derrapando por San Benito

¿Sabe cuántas carreras ganó Peluqui en La Constancia? ¿Sabe que Jaime Alguersuari, padre del piloto de F-1, corrió en San Benito? ¿Cuántas veces venció Ángel Nieto en El Portal? Todas estas preguntas y cualquiera relacionada con el Premio de La Merced, carreras urbanas que se corrieron en Jerez, primero en La Constancia, luego en San Benito y después en El Portal de 1958 a 1981, las contesta el libro 'El Premio de La Merced, carreras urbanas en Jerez' escrito por Jaime Barrigá y que en breve verá la luz auspiciado por la Diputación.

Barrigá, gaditano de Rosas (Gerona, 1952), vivió en primera persona las carreras urbanas en Jerez y su afición por las motos le llevó a recopilar datos hasta tener un material lo suficientemente valioso para que mereciera la pena publicarlo: "Yo tenía en internet un blog con fotos mías de carreras de coches y de motos, muchas de ellas eran de Jerez. Yo venía siempre a todas las carreras de Jerez, con mi padre venía de chico y después ya por mi cuenta. Siempre me ha gustado mucho la fotografía y hacía muchas fotos, siempre venía con la cámara e incluso revelaba yo las fotos en casa. Entonces, hice un blog en internet donde fui colgando todas las fotos, y ahí se pusieron en contacto conmigo aficionados que me decían quién era ese piloto, ese sitio, incluso me mandaban fotos, algunos de los que corrieron aquí".

El salto de calidad llegó cuando contactó con la familia de Paco Pacheco, pionero del motociclismo en Jerez y uno de los impulsores del Circuito permanente de velocidad, fallecido en 2010: "Uno de los contactos fue Pepe Pacheco, el hijo de don Francisco Pacheco, que con el Motoclub Jerezano organizaba las carreras de La Merced. Me fue dando datos y contacté con él, hice una visita al hostal Ávila y me fue enseñando documentos, el archivo que tenía de las carreras. Le dije que si le parecía bien que fuera escaneando los documentos para colgarlos en el blog, y tenía tantos datos y archivos y era una pena que se quedase ahí sin que los aficionados pudieran verlo y que se perdiesen con el tiempo. Lo suyo sería relatar la historia de todo esto pero para no hacerlo en internet, que se queda ahí en la nube como más perdido, intenté plasmarlo en un libro de historia, que relatase año por año las carreras. No se trataba de hacer una obra literaria ni mucho menos, porque yo no me siento capacitado, pero sí para hacer año por año la historia de las carreras gracias en una parte a los archivos y datos que me ha proporcionado Pepe Pacheco, lo que pasa es que sólo tenía del 70 en adelante".

El primer Premio de la Merced fue en el 58; las carreras anteriores se celebraron en la playa en Valdelagrana, y del 58 al 70, cuando el archivo de Francisco Pacheco ya comprendía los datos suficientes, "hubo que empezar a tirar de internet, de las hemerotecas, para tener constancia de que se celebró la carrera, de las fechas, y algo de las clasificaciones. También he tenido ayudas de otros aficionados, incluso de Cataluña, que tiene más costumbre en bucear por internet, me han ayudado bastante y he conseguido clasificaciones de todos los años, de todas las categorías que hubo incluso pequeños relatos, comentarios de las carreras para completar, revistas que ya no existen, del ABC, el Mundo Deportivo... toda la hemeroteca que existe por ahí, he podido conseguir esos datos".

Todo esto gracias a que el Premio jerezano superaba el ámbito local y provincial y tenía prestigio en toda España, fama que traspasó fronteras: "A principios de los sesenta ya empezó a ser internacional, no era el mayor evento de motos de España porque estaba el Gran Premio del Mundial en Barcelona y las 24 Horas de Montjuic, pero sí podría ser el tercero en importancia en cuanto a eventos de motos en España. Y además porque se mantuvo en el tiempo: también hubo buenas carreras en Alicante, en Madrid, pero ésta se mantuvo en el tiempo".

La última carrera de la Merced fue en el año 81; el Circuito de Jerez se inauguró en el 85 y hubo cuatro años en blanco: "En el año 81, en la entrega de premios, el entonces alcalde Pedro Pacheco dijo que la próxima carrera ya se iba a hacer en un circuito permanente, que allí ya no se podía porque era peligroso y el nivel de pilotos cada vez era mejor. Estaba el hombre entusiasmado por lo que veía allí y dijo que la próxima, en un circuito permanente. Y efectivamente, así fue. Lo que pasa es que la siguiente ya no fue el Premio de la Merced y Paco Pacheco y el Motoclub se vieron marginados totalmente en cuanto a organización y ya el Premio de la Merced se perdió, lo que hubo a partir de entonces fue todo en el Circuito: carreras a nivel nacional y el Gran Premio, que ya sabemos adónde ha llegado".

Además de datos, Barrigá ha coloreado el libro con multitud de anécdotas: "He intentado, a pesar de que no es una obra literaria, que sea legible, que sea amena, si no sería un catálogo o una recopilación de resultados".

Como no podía ser de otra manera, en el libro tiene papel protagonista Antonio Sánchez Garrido, Peluqui, piloto de la Albarizuela fallecido en el Premio del 63 y que fue padrino de bautizo de Pedro Pacheco, el que fuese alcalde: "Peluqui ganó muchas carreras en Jerez, entonces no había televisión y las noticias de otras carreras eran muy limitadas, y la afición de aquí veía una vez al año que un muchacho de Jerez ganaba dos carreras y al año siguiente otras dos y de ahí la leyenda. Peluqui era muy apreciado, muy conocido, y encima padrino de Pedro Pacheco. La primera curva que se bautizó en el Circuito fue la suya y la de Nieto".

El de Peluqui fue el accidente más grave que hubo en las carreras urbanas de Jerez: "Fue el más conocido, ha habido accidentes gordos que han supuesto el fin de la carrera de algún piloto como Tejedo en El Portal. Yo presencié uno en primera persona en San Benito, donde ahora hay una rotonda que viene del Hospital por la antigua circunvalación, según se subía ahí había que cambiar de la derecha con una farola en medio a la izquierda para ir a San Benito, y ahí se cayó a un par de metros de mí Mortimer, que había sido subcampeón del mundo. Me quedé impresionado, paja saltando, el piloto por un lado, la moto por otro...".

Y además de Peluqui, un mito en nuestra ciudad, había otros pilotos locales y provinciales que ganaron fama: "En el libro figura mucho Juan Gallego, de Jerez, que tenía un taller por la calle Doctrina. En Jerez había mucha venta de motos y distribución para toda la provincia e incluso Andalucía, tanto Pacheco como Gallego y García Jarana tenían un monopolio o exclusividad de marcas. Este, además de pilotos, era mecánico: yo coincidí con su hijo cuando hice mis pinitos en motocross, y en Cádiz estaba la competencia de estos dos, que era Luis Sáez, que casi ficha como piloto oficial, lo llegaron a llamar para correr con Montesa y Bultaco".

"A título de curiosidad -añade Barrigá- contactó conmigo uno de El Puerto que también corrió en la playa y aquí, en Jerez, y tengo una foto de Pacheco entregándole un trofeo: se llamaba Antonio Gentes. Falleció hace unos meses, le dije que si salía adelante lo del libro que contase con uno y ahora el compromiso lo tengo con su hijo".

Y estos representantes locales y provinciales se codearon con los mejo res pilotos españoles y "no solamente españoles sino a nivel mundial: Paco Pacheco tenía la habilidad, porque la fecha tenía que ser la fecha y la Merced es en septiembre, pero sí la suerte que coincidía el Gran Premio de España del Campeonato del Mundo por esas fechas. Entonces, esos pilotos ya estaban aquí, era final de temporada porque entonces era la última, no como ahora que es en noviembre, y aprovechaban unas minivacaciones, estaban una semana o diez días más y corrían en Jerez".

Con el libro ya en el horno, Jaime Barrigá tiene claro el objetivo de esta obra que pronto verá la luz (y que los aficionados que quieran pueden reservar en el correo electrónico jaimebr@ono.com): "Que no se pierda la historia de estas carreras, que fueron un evento muy importante para los aficionados. Sí, todo el mundo ha visto a Ángel Nieto correr en Jerez pero no hay nada donde te puedas fijar cómo, quiénes corrían con él y quiénes ganaron. He pretendido que esa historia no se pierda, que no se quede en el olvido, va a llegar un momento en el que los que fueron a ver estas carreras no estén o no puedan contarlo. Aquí está.

Y para los que no lo hayan vivido, que sepan que esto de Jerez de ahora en el Gran Premio no es casualidad, que esta afición que hay y estos Grandes Premios no han venido de repente. Antes, muchos pilotos, muchos mecánicos y muchos fabricantes, además de los organizadores, por supuesto, lo han dado todo por supuesto y han hecho carreras que han permitido que en Jerez se haya formado la que se ha formado, ese caldo de cultivo para lo que hay ahora. Que toda esta historia no se pierda y que las nuevas generaciones sepan y vean de dónde viene todo esto".