Excesivo castigo del Móstoles a un Xerez Toyota Nimauto peleado con el gol (1-5)

La primera derrota de la temporada en el Ruiz-Mateos le ha llegado al Xerez Toyota Nimauto en el peor momento del curso. Los azulinos han sufrido un durísimo varapalo ante el Móstoles, que ha decantado la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda A con un triunfo que ha basado en una gran defensa, una buena dosis de suerte -los xerecistas dieron cuatro palos y reclamaron un gol fantasma- y estar más acertados en los momentos cruciales del choque. Con este resultado tan abultado, el equipo de Isco Torres tendrá que apelar a la épica para darle la vuelta a una eliminatoria que se ha puesto muy cuesta arriba.

Los jerezanos saltaron a un Ruiz-Mateos lleno absoluto con las ideas claras, hacer pronto un gol que obligara al Móstoles a abrir sus líneas. Tote lo pudo hacer en el primer minuto con un disparo que Rafa Luque desviaba. El meta mostoleño tenía que aparecer instantes después sacando el pie izquierdo y salvando el tiro de Álex Constantino.

Dominaban los locales y a punto estuvo de llegar el 1-0 en un saque en largo de Juaki que Tote paró con el pecho. El azulino se giró y con la izquierda buscó portería, apareciendo esta vez Luque y el palo para evitar el primero de una calurosa tarde de abanicos en el polideportivo. Juaki apareció por vez primera despejando firme un lanzamiento de Carlitos, que lo intentó de nuevo en el 5' elevando por encima del meta, aunque también del larguero.

Jarro de agua fría

A los siete minutos, el Móstoles hacía el 0-1 en un claro error defensivo de los xerecistas. Guille lanzó en largo al desmarque de Xavi Cols, que le ganaba la espalda a la defensa y se plantaba ante el meta local, al que batió por debajo de las piernas. Al Toyota le tocaba buscar el empate ante un Móstoles que se defendía bien y fuerte, cargándose de faltas -cuatro en los primeros ocho minutos-. Constantino remataba acrobáticamente y Samu, con la zurda, estrellaba la pelota en el larguero.

La tensión crecía por momentos en la pista porque había mucho en juego y Móstoles se situaba con seis faltas a cuatro del final del primer período. El doble penalti lo ejecutaba Tote al palo, pero los colegiados ordenaban repetir. El azulino golpeaba de nuevo, esta vez al larguero y el rechace lo recogía Joselito para marcar de cabeza a puerta vacía.

Con el empate, el Toyota se vino arriba y se lanzó a por el segundo antes del descanso y a punto estuvo de lograrlo a dos del final tras una gran jugada colectiva que acabó con un taconazo de Joselito a Álex Constantino. Sin embargo, el remate se iba de nuevo al palo para desesperación de la hinchada.

Gol fantasma y 1-2

La segunda mitad arrancó con un gol fantasma que pareció ser válido. Tote jugó con Constantino y el remate de éste lo sacaba Luque de dentro de la portería. La afición reclamó gol, pero ninguno de los colegiados apreció que el balón entrase por completo en la meta madrileña. Y del posible 2-1 se pasaba al 1-2 con un golazo que llevó la firma de Aarón. Hizo la pared con Dani Santos, se la devolvió de tacón y el punterazo arriba imposible para Juaki.

Le tocaba de nuevo remar contracorriente al equipo de Isco. Constantino lo intentaba con un trallazo que Luque sacó al córner. Pidió el técnico tiempo muerto y el Xerez pasó a jugar de cinco con Tote portando el peto. En una pérdida casi cae el 1-3, evitándolo Joselito con la cabeza cuando el lanzamiento de Velasco iba a portería. Los locales lo intentaban, pero la circulación de balón no era fluida y no lograban perforar la pétrea defensa madrileña.

Dos más con uno menos

Al contrario, en una pérdida Dani Santos hacía el 1-3 que ya ponía las cosas muy difíciles a los locales, aunque en fútbol sala dos goles no son nada. Pero Samu veía la segunda amarilla en el 36' y el Móstoles aprovechó la superioridad para hacer el 1-4, obra de Palomares. Insistió el Xerez Toyota jugando de cinco y a falta de 35 segundos, Christian perdía el esférico siendo el último hombre y Velasco marcaba a puerta vacía el 1-5 definitivo.