Luis Suárez cambia de cara

El uruguayo abandona sonriente la sede del TAS tras declarar durante cinco horas por su mordisco a Chiellini El tribunal fallará en una semana

Luis Suárez se fotografía con un niño a la salida de la sede del TAS en Lausana.
Luis Suárez se fotografía con un niño a la salida de la sede del TAS en Lausana.
Ignacio Encabo (Dpa) Lausana

09 de agosto 2014 - 05:02

Luis Suárez declaró ayer durante cinco horas ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) y gastó la última vía para reducir la sanción que le impuso la FIFA por morder a Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil. El jugador del Barcelona estuvo acompañado por abogados del club y de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), las dos entidades afectadas por la sanción a Suárez, apartado cuatro meses de cualquier actividad relacionada con el fútbol y suspendido nueve partidos con su selección.

"Al final de la vista, el panel informó a las partes que publicará su decisión tan pronto como sea posible, probablemente antes del final de la próxima semana", señaló en un comunicado el tribunal con sede en la ciudad suiza de Lausana. El TAS precisó que el laudo completo se hará público días más tarde de la decisión.

La FIFA tuvo en cuenta a la hora de decidir la sanción la reincidencia de Suárez, ya que era el tercer mordisco del uruguayo a un rival. Sin embargo, tanto la AUF como el Barcelona estimaron que la sanción fue demasiado severa y recurrieron al TAS. Si el tribunal no le rebaja la sanción, el futbolista no podrá jugar un partido oficial ni entrenarse con sus compañeros hasta el 26 de octubre, cuando el Barcelona visita al Real Madrid.

Vestido con una camisa de cuadros azul y rodeado de cámaras, Suárez se presentó a primera hora de la mañana en la sede del TAS acompañado por su representante, Pere Guardiola. Acto seguido, llegaron los abogados del jugador y los contratados por la AUF.

Suárez, de 27 años, declaró durante cinco horas ante el panel compuesto por los suizos Bernhard Welten (presidente) y Marco Balmelli y Luigi Fumagalli. Minutos después, se subió en un coche sin pronunciar palabra camino del aeropuerto para tomar un vuelo con destino Barcelona. Aunque no reveló sus impresiones, sí firmó algunos autógrafos a los aficionados. Uno de ellos llevaba una pancarta: "Suárez, queremos verte jugar en el Barcelona".

Al término de la sesión, el abogado uruguayo Alejandro Balbi dijo que quedó "satisfecho por haber comparecido ante un organismo independiente". "Todas las partes fuimos oídas con garantías. Luis fue interrogado ampliamente y todos tuvieron la oportunidad de expresarse libremente", dijo.

"Solamente habrá que esperar el fallo, que se demoraría ocho o diez días, pero hay que ser prudentes", añadió Balbi, quien apostilló: "Luis estuvo distendido, pero con la ansiedad natural de quien quiere volver a jugar cuanto antes. No es lo mismo entrenarse solo en un gimnasio que entrenar con un equipo".

La defensa confía en una rebaja de la sanción después de que el propio Suárez pidiera perdón a Chiellini y a la familia del fútbol y de que el defensa italiano considerara también excesiva la sanción. La Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) también criticó con dureza la sanción y abogó por una rebaja.

stats