"Estoy contento con mi trabajo pero el míster es el que decide"
l El centrocampista no termina de ganarse la confianza de Esteban y espera cerrar el año consiguiéndolo l "Nuestro objetivo es mejorar en casa y marcharnos de vacaciones con dos buenos resultados", asegura
Lucas Porcar fue uno de los últimos fichajes del Xerez el pasado verano y uno de los que más entusiasmo despertó entre los aficionados. Su trayectoria en el filial del Villarreal le sirvió para llamar la atención del Zaragoza, club por el que firmó. Tras realizar la pretemporada a las órdenes de Manolo Jiménez, el técnico sevillano dio luz verde a su cesión para que tuviese minutos y alcanzase el grado de madurez que él estima le falta para Primera.
El catalán aterrizó en Jerez muy ilusionado pero con problemas físicos, problemas que le pasaron factura, ya que Esteban tenía ya su bloque montado. Le está costando entrar en el equipo pero no pierde la ilusión, espera ganarse la confianza del técnico en estos dos partidos que restan para cerrar el año y apuesta por una buen segunda vuelta, tanto a nivel de equipo como en el plano personal.
-Esteban puede realizar cambios en El Molinón, ¿se encuentra preparado para ser titular ante el Sporting?
-Yo estoy preparado para lo que sea, para lo que decida el míster. Si decide que tengo que salir desde el inicio, perfecto y si hay que esperar en el banquillo, también.
-¿Cómo afronta el partido frente al equipo asturiano?
-Con mucha ilusión, me han comentado que es un campo muy bonito, espectacular y nunca he jugado ahí. Los dos últimos partidos los encaramos con ganas de terminar bien el año, a ver si lo cerramos con buenos resultados.
-No está teniendo demasiadas oportunidades, ¿qué le falta a Lucas Porcar para aparecer más en las alineaciones?
-Eso es un tema que hay que preguntárselo al entrenador, que es la persona que toma las decisiones. Yo estoy contento con mi rendimiento. Cuando entrena, uno lo que espera es jugar el mayor número de minutos posibles porque jugar te da vida pero es cuestión del entrenador. Él pensará que cada alineación que hace es la mejor para el equipo y yo intento que esperar mi oportunidad.
-¿Se desanima con esa situación tan complicada?
-No, para nada. Cuando uno lleva ya varios años en el fútbol profesional, aunque aún soy joven, sabe que es lo que hay. Estoy preparado para todo, aunque reconozco que no es igual jugar que estar en el banquillo o no ir convocado. El ánimo y todo no es el mismo.
-¿Le han preguntado desde Zaragoza por qué no juega?
-No, en Zaragoza no me han preguntado nada ni yo he concedido ninguna entrevista a nadie.
-¿Cómo ha encajado el vestuario los últimos resultados en Chapín?
-Mal, como los aficionados. Esperábamos haber sumado más puntos en casa, pero ahora nos quedan dos partidos antes del parón de Navidad y sólo pensamos en sacar el mayor número de puntos posibles para marcharnos de vacaciones tranquilos y entrar en una buena racha para estar arriba en la clasificación.
-¿Por qué es tan diferente la imagen que ofrece el equipo dentro y fuera?
-Es cuestión de cambiar un poco la mentalidad, tenemos que coger más confianza en Chapín, debemos olvidarnos un poco de la presión y hacer nuestro juego. De todos modos, también es normal que en casa queramos sacar mejores resultados. Aún así, esto es muy largo y esperamos que cambie la dinámica, los resultados tienen que llegar porque el equipo trabaja bien.
-¿Se verá la mejor versión del Xerez en El Molinón?
-Esperemos. El Sporting es un histórico que no se encuentra en su mejor momento después del descenso de la temporada pasada, necesita ganar, irá a por el partido, el encuentro será disputado y en ese terreno nos movemos bastante bien. Hay que aprovechar esa ansiedad que puedan tener por ganar en casa, hay que aprovechar su ansiedad y convertirla en una ventaja para nosotros.
-El equipo está teniendo muchos problemas con los campos de entrenamiento y cada día debe trabajar en un lugar diferente, ¿influye eso de forma notable en el rendimiento?
-Ojalá pudiésemos entrenar todos los días en el estadio, eso pocos equipos lo pueden hacer. En Montecastillo, por ejemplo, se entrena fenomenal, ojalá pudiésemos trabajar aquí con más asiduidad. Aún así, nosotros tenemos que adaptamos a lo que nos echen, esto está montado así.
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