El Xerez Toyota se reencuentra con el triunfo fuera de casa en una vibrante cita en Málaga (2-3)

El Xerez Toyota Nimauto se ha reencontrado con el triunfo -acumulaba dos empates en Ceuta y Melilla- lejos del Ruiz-Mateos en un intenso y vibrante encuentro ante el Malacitano Futsal, una escuadra recién ascendida que se ha convertido en uno de los equipos revelación del Grupo 5 de Segunda B. Los xerecistas se impusieron por 2-3 a base de mucho trabajo en el Tiro de Pichón. Tras un inicio de partido igualado, lograron marcharse al descanso venciendo por 0-2, con dianas de Joselito, que anotó un tanto magistral de falta directa, y Álex Constantino. En el segundo acto, los locales aprovecharon dos fallos de los xerecistas en dos pérdidas, que jugaban de cinco, para empatar. Manu Orellana le puso la firma a una justa victoria azulina en una pista complicada.

El triunfo permite al Xerez Toyota conservar la tercera plaza de la clasificación con 26 puntos tras once partidos disputados y no perder la estela de ElPozo Murcia B y Avanza, primero y segundo, respectivamente con 28. El filial, con mejor diferencia de goles que el cuadro jiennense, superó en una cita espectacular y con muchos goles al Energy Alcalá por 8-5 y los segundos se impusieron de forma apretada al Bujalance por 3-2.

Isco, satisfecho

Isco Torres, técnico del conjunto azulino, ha explicado que "la victoria fue trabajada e importante, en una pista muy difícil y frente a un equipo joven, que hace un juego muy vertical y alegre". Además, recuerda que "en los primeros momentos del partido tuvimos que aguantar sus embestidas y tuvieron un par de ocasiones que Juaki solventó bien y que nos permitió mantener la igualdad en el marcador. Luego, poco a poco, nos fuimos afianzando sobre la pista, mostrándonos firmes en defensa y generando oportunidades y fruto de ello, el resultado con el que nos marchamos al descanso, 0-2".

En cuanto al segundo acto, resalta el preparador isleño que "comenzó con la misma dinámica, el equipo estaba controlando el juego y opté por colocar a la figura del portero-jugador demasiado pronto para intentar jugar un poquito con la ansiedad que estaba viendo en el rival y pensando que podíamos generarles ocasiones ante una defensa alta, pero en dos pérdidas un poco tontas cerca de nuestra área nos empataron".

Para poner freno a esos desajustes, solicitó un tiempo muerto y "mantuvimos el juego de cinco, el equipo siguió creyendo. En este caso, el rival sí que se echó un poco más atrás y, a partir de ahí, empezamos a generar ocasiones. El partido volvió a la normalidad, nos hicimos con el mando y generamos diferentes situaciones de gol. En una de ellas, nos adelantamos y ese tanto ya sí que fue definitivo. En los últimos momentos, ellos también optaron por el juego de cinco, pero mis jugadores supieron defender bien las situaciones, no nos generaron dudas y nos quedamos con los tres puntos. El encuentro tuvo altibajos y hay cosas que mejorar, pero logramos tres puntos importantísimos fuera de casa ante un rival peligroso, que dará que hablar esta temporada. Nos vamos contentos, la victoria nos ha dado mucha moral de cara al compromiso del sábado frente al Virgili en el Ruiz-Mateos".