Análisis
Santiago Carbó
Tras un buen año en lo macroeconómico, en 2025 hará falta mucho más
Madrid/España está preparada para pedir un rescate a la zona euro para sus finanzas públicas tan pronto como el próximo fin de semana pero Alemania ha dicho que debe esperar, según aseguraron este lunes altos cargos europeos. Es el último giro en la crisis de deuda soberana que dura ya tres años y llega mientras los mercados financieros y otros socios europeos presionan a Madrid para que pida un programa de rescate que permita al Banco Central Europeo comprar sus bonos. "Los españoles dudaban un poco pero ahora están preparados para pedir ayuda", dijo un alto cargo europeo. Otras tres fuentes en la zona euro confirmaron el cambio de rumbo en la posición española, todos bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar del asunto.
El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ha dicho que España está llevando a cabo todos los pasos necesarios para superar sus problemas fiscales y no necesita un rescate, argumentando que los inversores lo reconocerían y recompensarían en su debido tiempo. De forma privada, algunos diplomáticos europeos y un alto cargo alemán han dicho que la canciller Angela Merkel prefería evitar plantear más rescates individuales para países de la zona euro en dificultades a su cada vez más reacio parlamento. "No tiene sentido enviar decisiones inminentes sobre Grecia, Chipre y posiblemente también sobre España una por una", dijo la fuente. "Empaquetarlas tiene sentido, por la sustancia y también políticamente".
Participantes en la cumbre de ministros de la zona euro a mediados de septiembre dijeron que hubo tensos intercambios en la reunión celebrada en Chipre cuando Schäuble dijo a sus socios que Berlín no puede asumir otro rescate sobre España tan poco tiempo después de que se haya aprobado el rescate de hasta 100.000 millones de euros para los bancos españoles en julio.
Preguntada sobre las noticias de que Alemania está presionando a España a que espere, un portavoz del Gobierno alemán dijo a Reuters: "Cada país decide por sí mismo. Alemania no está presionando ni en una dirección ni en otra". Una portavoz del presidente del Gobierno español Mariano Rajoy dijo que no tenía conocimiento de ningún veto por parte de Alemania a una petición de rescate. "Estamos centrados en llevar a cabo las decisiones tomadas en junio cuando se aplicó la unión bancaria. Eso sería enviar un fuerte mensaje de confianza a los mercados", dijo, refiriéndose a una decisión de la UE para centralizar la vigilancia de los grandes bancos para evitar una repetición de una crisis que tiene algunas de sus raíces en el sistema financiero.
Fuentes europeas dijeron que el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios Olli Rehn iba a enviar el mensaje a los dirigentes españoles de que Bruselas quiere que pidan la asistencia pronto y no impondrá duras condiciones más allá de las reformas y medidas de contención del gasto ya esbozadas por el Gobierno español. Bruselas está deseosa de evitar otro paroxismo en la crisis de deuda consiguiendo el apoyo para España antes de que sea expulsada de los mercados de deuda, con el riesgo de posible contagio para Italia y otros países de la zona euro.
Rehn se reunió con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y con el ministro de Economía, Luis de Guindos, en Madrid y dijo después de que las condiciones de cualquier programa de ayuda eran bien conocidas por todos los gobiernos de la zona euro. "Las condiciones estarán basadas en recomendaciones específicas que fueron decididas por los 27 países miembro en julio y había una serie clara de prioridades políticas y una clara secuencia temporal sobre la base de esas recomendaciones específicas para cada país", dijo en una rueda de prensa.
La zona euro está estudiando una llamada Línea de Crédito con Condicionalidad Reforzada (ECCL, por sus siglas en inglés) que mantendría a España en los mercados con apoyo de los fondos de rescate de la zona euro en el mercado primario de bonos y del BCE en el secundario.
Rajoy quiere evitar la humillación política de unas condiciones impuestas desde fuera y reforzadas por la troika de inspectores del Fondo Monetario Internacional y del Banco Central Europeo que han supervisado los programas para Grecia, Irlanda y Portugal. Ha habido amplia especulación de que Rajoy estaba esperando pedir el rescate hasta el 21 de octubre cuando se celebran elecciones en su Galicia natal y en el País Vasco. Pero diplomáticos dijeron que es el freno alemán, no el orgullo español, lo que estaba detrás de esperar para pedir ayuda.
Un alto diplomático europeo dijo que la posición de España era: "Estamos a favor si todo el mundo acepta". Madrid no quiere arriesgarse pidiendo un rescate y encontrarse con el rechazo de Berlín poniendo inaceptables condiciones como un fuerte recorte de las pensiones u obstáculos procedimentales, dijo.
Evitar el rescate total
La alta fuente de la zona euro dijo que los líderes españoles habían entendido que hacer un movimiento ahora es el mejor modo de evitar perder acceso a los mercados y ser forzados por un rescate estatal total. "El giro alemán ha convencido a España de que podría acabar en el futuro no tan lejano en la misma posición de Grecia, Portugal o Irlanda, expulsados de los mercados y con un programa de ajuste muy exigente", dijo la fuente.
El Gobierno español dijo que aplicará 43 reformas estructurales en los próximos seis meses y Bruselas aseguró que hay un calendario detallado que va más allá de lo que la Comisión había pedido a España y es un ambicioso paso hacia adelante. Rehn afirmó que estaba totalmente confiado en que España llevaría a cabo los pasos necesarios para restaurar la economía y añadió que deben seguir reformando su sistema de pensiones, uniendo la edad de jubilación a la esperanza de vida. Rajoy ha dicho que las pensiones son la última cosa que recortará, aunque ha dicho que introduciría cambios en la legislación sobre pensiones antes de que acabe el año.
España necesita refinanciar unos 29.000 millones de euros en vencimientos de deuda -entre los que hay 9.000 millones en papeles a corto plazo- antes de final de mes.
De acuerdo con uno de los escenarios en estudio, las fuentes de la eurozona creen que España está preparada para hacer la petición este fin de semana con el acuerdo alemán, para que los ministros de Finanzas de la eurozona pudieran abordarla en su próxima reunión regular en Luxemburgo el lunes. En caso de que no fuera así, Madrid podría hacer la solicitud antes del Consejo Europeo del 18 y 19 de octubre en Bruselas, pero socios de la eurozona como Francia e Italia, que están presionando para que la decisión se tome antes, no querrían prolongarlo más allá, añadió una de las fuentes.
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