Andalucía intensifica la promoción para paliar la pérdida de turistas alemanes

Berlín/El turismo alemán está disminuyendo en España por la ralentización de su economía, por la pérdida de algunas conexiones aéreas directas y, principalmente, porque otros países que estaban de capa caída y que siempre han sido muy del gusto del viajero germano como Turquía, Grecia o Túnez se están recuperando a través de fuertes ofertas. El consejero de Turismo, Juan Marín, destacó hoy en la inauguración del expositor andaluz en la Feria Internacional de Turismo de Berlín (ITB) que el año pasado visitaron la comunidad andaluza 1,3 millones de turistas, un 4% menos que el ejercicio anterior. “Es un descenso preocupante, peor de lo que esperábamos, pero no alarmante y eso nos obliga a hacer un esfuerzo mayor para recuperar ese espacio perdido”, reconoció Marín.

Andalucía, gracias a la variedad de su oferta, puede llorar con un ojo porque en otros destinos competidores como Baleares o Canarias la disminución ha sido superior al 5%. También hay que tener en cuenta que se parte de cifras muy elevadas en los años anteriores, de récords históricos, por lo que el descenso de turistas británicos o alemanes tenía que llegar antes o después. Es ley de vida porque los competidores pugnan por la misma tarta, como puede apreciarse en los numerosos expositores de todos los países que pueden observarse en esta ITB que arrancó hoy y que concluirá el domingo.

Para combatir ese descenso, el consejero lanzó varias medidas. La primera es que la Junta de Andalucía va a poner en marcha una campaña especial de promoción en el mercado alemán entre abril y junio con una inversión de 250.000 euros de cara a captar más turistas alemanes para el verano. “Estamos convencidos de que el turista alemán no nos va a fallar este verano”, dijo convencido Marín. A eso hay que añadirle, como adelantó el pasado lunes en una rueda de prensa en Málaga, que Turismo Andaluz va a participar en seis ferias especializadas a lo largo del año en Alemania, entre otras actividades.

En segundo lugar, uno de los aspectos que dificultan la llegada de viajeros alemanes es la pérdida de conexiones aéreas tras las quiebras de Air Berlín, Niki o Germania. El alemán es un cliente tradicional al que le cuesta cambiar de hábitos y de compañía aérea, por lo que tiene que ir adaptándose a la oferta de otras aerolíneas como Norwegian, Easyjet o Ryanair que se están quedando con los slots de las firmas quebradas. Marín comentó que “estamos trabajando para reforzar la conectividad aérea” y adelantó que están en conversaciones con el gobierno central y Aena para tratar de conseguir que Iberia abra más vuelos directos entre Alemania y los aeropuertos de Málaga y Sevilla. En cualquier caso, el consejero recordó que esta año hay más de 760.000 asientos ofertados en aviones entre Alemania y Andalucía, por lo que el volumen es alto.

Marín se reunió con directivos de touroperadores como TUI, Thomas Cook, Gebeco o TSS Group y aseguró salir “con una sensación positiva”. “Veníamos un poco pesimistas por los datos del año pasado pero los touroperadores me han trasladado lo contrario, me han dicho que en febrero ha habido un repunte importante de reservas y que muchos alemanes van a venir a Andalucía este año”.

Uno de los participantes en ese encuentro fue Rulf Treidel, directivo de Gebeco, quien señaló que hay cierta cautela entre los turistas porque hay dudas sobre la evolución de la economía germana y porque están aumentando los precios. “En líneas generales, este verano puede ser flojo de turistas alemanes para Andalucía en los touroperadores grandes. Las cifras de reservas ahora son bajas pero espero que se aceleren un poco en las próximas semanas”, resaltó Treidel, quien hizo hincapié en que “Turquía vuelve” y que habrá mas descenso en las islas.

Manuel Molina, director de TSS Group, explicó que “hemos comenzado flojos en las reservas de verano a Andalucía porque en los dos últimos años hemos vendido un 15% más y ahora caemos un 5% sobre eso” y abogó por hacer campañas más “inteligentes” dirigidas al cliente final. Molina cree que habrá una recuperación para el otoño y recordó que la diferencia de precio en un viaje de dos semanas en un hotel de cinco estrellas a Turquía o a la Costa del Sol puede ser de unos 900 euros, lo que está provocando que muchos turistas estén optando por viajar al país turco. No obstante, destacó que Andalucía “está muy preparada” y reclamó una mayor formación profesional.