El consumo de vino en España sube el 1,3% hasta julio y mantiene un crecimiento moderado

El consumo de vino en España mantiene su tendencia al alza, aunque moderada, tras un crecimiento del 1,3% en el interanual a julio de 2024, periodo que, según datos del Sistema de Información del Sector Vitivinícola (Infovi), cierra con 9,76 millones de hectolitros. La evolución mantiene la línea de los últimos meses, con tasas de variación estables por encima del 1%.

Los últimos datos del Infovi, de los que se ha hecho eco la Interprofesional del Vino de España (OIVE), confirman el crecimiento, aunque lento, de las ventas de vino en España, que en julio alcanzaron los 0,84 millones de hectolitros, un 6,5% más que en el mismo mes de 2023.

Los buenos resultados de julio animan el crecimiento acumulado en lo que va de año, que se sitúa un 2,2% por encima del registrado en el mismo periodo de 2023, destaca la OIVE.

Esta situación tiene reflejo en la mejora de la evolución del canal de alimentación, el principal canal de venta de vino en España, en el que el consumo sube un 4% en valor, hasta los 1.773 millones de euros, mientras que en volumen registran un ligero alza del 0,1%, hasta 4,07 millones de hectolitros en 12 meses. Se trata del mejor dato en los últimos tres años, según el análisis de junio a julio realizado por Nielsen IQ.

El consumo en el canal de hostelería modera las caídas registradas en primavera, reduciéndolas al -1,2% en valor y -2,1% en volumen, hasta alcanzar los 1.396 millones de euros y 2,2 millones de hectolitros, respectivamente.

De acuerdo con el análisis de la consultora Nielsen, las ventas en conjunto de estos dos canales en el último año, hasta julio, registran no obstante un descenso del 0,7% en volumen, pero crecen un 1,6% en valor, gracias a la subida del precio medio, hasta superar ligeramente los cinco euros el litro (+2,4%),

En cifras absolutas, las ventas en ambos canales en los últimos doce meses se sitúan en 6,27 millones de hectolitros, lo que se traduce en un valor de 3.170 millones de euros.

La interprofesional del vino ha precisado que esta lenta recuperación del consumo de vino en España se produce en momentos de grandes dudas generadas en particular en Francia y Estados Unidos sobre el consumo mundial del vino.

De esta forma, los mercados se encuentran en un contexto en el que se aprecian importantes cambios de tendencia. Por un lado, el mantenimiento de muchos consumidores fieles a los sabores y orígenes tradicionales del producto, y, por otro, un fuerte crecimiento de nuevas categorías de vino más frescos y fáciles de tomar que están atrayendo a nuevos consumidores en los cinco continentes.

En este último aspecto, el sector destaca que los vinos españoles están mostrando ser cada vez más competitivos, como demuestra el crecimiento de las exportaciones.