La comunidad vuelve a ser la primera región en aprobar sus presupuestos

Sevilla/El Gobierno andaluz podrá agotar la legislatura sin sobresaltos después de que el apoyo de Ciudadanos le haya permitido soslayar el rechazo del resto de la oposición para sacar adelante sus presupuestos por tercer año conecutivo. Andalucía vuelve a ser la primera comunidad en aprobar unas cuentas que "garantizan la estabilidad política, institucional y económica de nuestra tierra", según indicó la presidenta de la Junta, Susana Díaz, en un vídeo divulgado tras el pleno celebrado este jueves en el Parlamento andaluz.

Los presupuestos de 2018 contemplan un gasto de 34.759 millones de euros, un 4,6% más que los de este año. Para lograr el apoyo del partido naranja, los socialistas han aceptado una nueva rebaja del impuesto de Sucesiones y Donaciones, cuyo mínimo exento se eleva a partir del 1 de enero hasta el millón de euros. En respuesta a las críticas a la situación de la sanidad pública, las cuentas también recogen la mayor dotación presupuestaria de la historia para el Servicio Andaluz de Salud (SAS), que contará con 9.013 millones, un 5,4% más que el año anterior, y recibe uno de cada tres euros del presupuesto. Se refuerzan también las partidas de educación (7.527 millones, un 3,8 % más), dependencia (1.214 millones para dar cobertura a 186.000 beneficiarios) y servicios sociales, con 2.132 millones, un 7,2% más. Sin embargo, la inversión sólo aumenta un 1,2% hasta 3.700 millones. Los presupuestos incorporan nuevos derechos como la Renta Mínima de Inserción Social, a la que se dedican 198 millones, y la bonificación de las matrículas universitarias. Asimismo, a partir del 1 de enero ningún empleado público de la Junta a jornada completa cobrará menos de 1.000 euros al mes.

Como es tradicional, la consejera de Hacienda, María Jesús Montero, cerró el debate antes de la votación final para agradecer a todos los grupos políticos la "intensa labor" durante la tramitación del presupuesto, especialmente a Ciudadanos "por su capacidad de diáologo y su disposición a llegar a acuerdos", y al PSOE-A por "poner siempre Andalucía por delante de cualquier otro interés".

El líder del partido naranja, Juan Marín, incidió en que "no son los presupuestos de Ciudadanos pero sí hemos sido útiles para mejorar la calidad de vida de los andaluces". Como ejemplo, Marín destacó "la eliminación del impuesto de Sucesiones para el 98% de los andaluces", y afeó la actitud del resto de grupos de la oposición por "no querer negociar sus enmiendas".

Finalmente, ninguna de las casi 1.200 enmiendas de la oposición que quedaron "vivas" antes del debate de los presupuestos se ha incorporado a las cuentas por el voto negativo de PSOE y Ciudadanos. En línea con lo que ocurrió en la sesión plenaria del miércoles, PP y Podemos intercambiaron abstenciones en sus enmiendas, mientras que Podemos e IU se apoyaron mutuamente y los populares respaldaron varias de la federación de izquierdas.

La portavoz parlamentaria del PP-A, Carmen Crespo, lamentó que "el rodillo y la soberbia" hayan estado presentes durante las votaciones para "rechazar en bloque la mejora de unos presupuestos vitales para Andalucía".

Por su parte, la coordinadora de Podemos Andalucía, Teresa Rodríguez, afeó al PSOE que no haya contado con el resto de partidos y recriminó a Ciudadanos que su función sea "apuntalar al bipartidismo" y en Andalucía al PSOE, con un "servilismo asombroso". El coordinador regional de IU, Antonio Maíllo, coincidió en criticar el "blindaje brutal" del PSOE y Ciudadanos al rechazar las enmiendas, incluidas las propuestas que la formación naranja sí apoyó en el reciente debate sobre el estado de la Comunidad.