Ayuso baja el tono pero sigue el pulso de PSOE y PP por el ahorro energético

El Ejecutivo y los territorios gobernados por los socialistas continuaron el rifirrafe con el PP por el plan de ahorro energético y la negativa de Isabel Díaz Ayuso a aplicarlo en Madrid, aunque su Gobierno ha rebajado el tono al avenirse a cumplir el decreto si no tiene otro remedio. Fue el vicepresidente madrileño, Enrique Ossorio, quien aseguró que Madrid tiene la "mala costumbre" de cumplir las leyes y, por tanto, si tiene que cumplir el decreto ley "en esos extremos", lo hará, aunque, mientras tanto, siguen estudiando si lo recurrirán al Tribunal Constitucional (TC) por un choque competencial.

También en Madrid se han rebelado contra las multas que consideran desorbitadas: "¡Sanciones de hasta 100 millones de euros por no poner bien el termostato y nada por homenajear a terroristas!", exclamó el consejero de Presidencia, Enrique López.

En todo caso, el PP volvió a la carga contra este plan energético, que entrará en vigor el próximo martes, y eso que el propio líder popular, Alberto Núñez Feijóo, defendió hace un par de semanas medidas para limitar el aire acondicionado en verano y la calefacción en invierno y ahorrar en el alumbrado eléctrico nocturno, entre otras propuestas, ante eventuales cortes en el suministro a Europa por parte del régimen ruso.

La principal crítica que ahora hacen al Ejecutivo es que ha impuesto el plan de ahorro sin ningún tipo de consenso con las comunidades autónomas ni ayuntamientos, como se ha quejado el coordinador general del PP, Elías Bendodo, que el martes apoyaba a Ayuso y al resto de responsables autonómicos al asegurar que tenían "libertad para decidir" si aplican o no estas medidas. Desde el PP advirtieron también de la inseguridad que el apagado forzoso a las diez de la noche de establecimientos, monumentos y otros espacios públicos puede acarrear especialmente para las mujeres, según apuntó la portavoz adjunta del PP en el Congreso, Marta González, o la alcaldesa de Santander, Gema Igual, quien insistió en que las normas se cumplen "si no traen otro perjuicio mayor".

Desde el Gobierno central volvieron a poner el foco en el comportamiento de Ayuso, que la ministra de Justicia, Pilar LLop, tachó de "impresentable", mientras que la titular de Ciencia, Diana Morant, respondió a la presidenta de Madrid que lo triste no es apagar las luces de los establecimientos para ahorrar energía, sino la guerra de Ucrania.

Mucho más duro fue el nuevo portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, que considera que el PP ha dado "impunidad para delinquir" a sus responsables autonómicos al darles libertad para aplicar o no el plan de ahorro energético.

López reclamó al presidente del PP, Alberto Nuñez Feijóo, "que ponga orden, de una vez por todas", en su partido porque no cumplir las medidas del plan de ahorro energético, establecidas por decreto ley, sería "cometer un delito" y se tendría que responder ante los tribunales de ello. Destacó que el plan de ahorro energético del Gobierno no implica ni cierre de empresas ni recortes en los hogares, algo que, según ha recordado, pedía el líder de los populares "hace escasamente diez días".

Entretanto, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, exigió a Feijóo que aclarara inmediatamente si estaba con Europa -que pide a España una reducción del 7% en el gasto energético- o con la nueva "insurgencia" de Ayuso.

Las comunidades gobernadas por el PSOE, que apoyan sin titubeos la reducción de la factura energética, ya han anunciado que estudiarán con la patronal y los sindicatos la manera "más eficaz" de aplicar estas medidas y que provoquen el menor trastorno posible.