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Cuarta jornada noche con incidentes en Barcelona con enfrentamientos entre antifascistas y ultras de derecha

Crisis en Cataluña

Los CDR desconvocaron la manifestación a primera hora de la noche "para guardar fuerzas" para el viernes.

Cargas al encontrarse concentraciones de ultras y otra de la izquierda independentista

La Policía utilizó gases lacrimógenos el miércoles.

El balance oficial apunta a al menos 42 heridos y 19 detenidos durante los altercados.

Grupos anarquistas y antisistema de fuera de Cataluña entre los CDR

El motín se agrava y Torra lo vincula a "infiltrados"

Varios manifestantes prenden fuego a un contenedor de basura. / EFE
R. D. / Agencias

17 de octubre 2019 - 21:28

Lo que en un primer momento parecía que iba a ser una noche más tranquila se ha ido haciendo cada vez más tensa. Grupos radicales han vuelto a provocar incidentes en Barcelona con lanzamientos de objetos a la Policía, hogueras y barricadas incendiadas. También se ha registrado una agresión a un ultra. En total se han registrado 19 detenciones y fueron atendidos 42 heridos.

La noche arrancaba con normalidad. Los Comités de Defensa de la República (CDR) desconvocaban a primera hora la manifestación que desde las 19:00 reunió a 13.000 personas, según cifras de la Guardia Urbana, en Els Jardinets de Gràcia, en la cuarta jornada de protestas contra la sentencia del procés. Los CDR informaron a través de las redes sociales de que la daban por acabada su marcha, asegurando que todos necesitan levantarse temprano este viernes, cuando está convocada una huelga general en Cataluña.

Hasta entonces todo transcurría con un ambiente festivo. Pero pasaban los minutos y la tensión aumentaba de nuevo en la ciudad condal. Los Mossos d'Esquadra comenzaban a realizar cargas policiales contra grupos radicales procedentes de una concentración de unos 200 ultras y otra convocada por Arran y grupos antifascistas.

Los manifestantes respondieron encendiendo hogueras y quemando contenedores. Muchos encapuchados rodeaban los fuegos en la Rambla, en el centro de la ciudad. A la vez, otro grupo antifascista en el cruce Balmes-Mallorca quemaba 3 contenedores.

Las dos manifestaciones de signo contrario se encontraron en la plaza de Sarrià; allí agentes de la Policía catalana han disparado salvas y han cargado con las porras contra un grupo de manifestantes de extrema derecha.

También se ha registrado una agresión a un ultra en la calle Muntaner de Barcelona a la altura de la calle Mallorca. Ha ocurrido en torno a las 23:10 , después de que el grupo de antifascistas, formado por más de 100 personas, avistara a un ultra. Después de la agresión, el hombre ha quedado tirado en el suelo y ha sido atendido por una ambulancia, que se lo ha llevado pasadas las 23:20.

Ambas manifestaciones se han colocado una frente a la otra durante la tarde, contenidas cada una por un cordón de los Mossos d'Esquadra para impedir que se encontraran. El grupo ultra ha lanzado pirotecnia, botellas y otros objetos a la línea policial y más allá, intentando alcanzar a la otra concentración.

La policía catalana también ha retenido durante unos minutos a un joven que ha cruzado la manifestación antifascista con una bandera española, y después se ha unido a la manifestación contraria.

Balance oficial

Las protestas terminaron con 42 heridos -entre ellos cinco mossos-, que han sido atendidos por el Sistema Català d'Emergències (SEM), según ha informado el servicio.

La mayoría de las asistencias se han producido en Barcelona y en concreto en el distrito de Eixample, donde el SEM ha hecho ocho altas in situ y seis traslados.

También ha hecho cuatro asistencias en Gerona con dos altas in situ y dos traslados, en una jornada donde el balance ha sido menor al de los últimos días: el miércoles hubo 96 heridos y el martes 72.

La cuarta jornada de protestas violentas se salda con al menos 19 personas arrestadas, según los Mossos d'Esquadra.

Cinco menifestantes fueron detenidos en Gerona, tres en Tarragona, dos en la zona central y uno en Barcelona.

Según informa la policía catalana, este balance es provisional, así que el número de detenidos podría aumentar a lo largo de la mañana.

El Eixample de Barcelona fue escenario este jueves de violentos disturbios por tercera noche consecutiva, que comenzaron cuando radicales independentistas y de extrema derecha se han enfrentado entre ellos, y han culminado con nuevos actos de guerrilla urbana de independentistas contra los Mossos d'Esquadra.

A las barricadas, hogueras y quema de mobiliario urbano y objetos de terrazas y comercios, se sumaron por lo menos, tres agresiones: dos de grupos de extrema derecha a jóvenes independentistas y otra en la que la víctima ha sido al parecer un joven de extrema derecha.

La primera agresión tuvo lugar en la confluencia de las calles Balmes y Rosselló, donde un manifestante independentista recibió una paliza por parte de ultraderechistas que portaban palos y bates, un incidente que ha sido confirmado por los Mossos y que ha sido grabado por varias personas y se ha difundido ampliamente en las redes sociales.

Además de esta agresión, al menos otro joven independentista fue golpeado por extremistas de signo contrario en la calle Enrique Granados con Mallorca.

Por otra parte, en Twitter se han difundido otros vídeos en los que aparece un joven, al parecer de extrema derecha, que es apaleado y golpeado por varias decenas de personas que le causan una brecha en la cabeza.

La Policía utilizó gases lacrimógenos el miércoles en Barcelona

La Policía Nacional utilizó gases lacrimógenos en momentos puntuales durante los disturbios de la noche del miércoles en Barcelona, para ganar espacio cuando les caía una lluvia de objetos y mientras algunos manifestantes les arrojaban ácido.

Según fuentes policiales, el uso de estos gases lacrimógenos fue puntual, al verse los agentes en riesgo cuando algunos concentrados en el centro de Barcelona les arrojaban piedras y todo tipo de objetos y les atacaban con ácido.

Disparando gases lacrimógenos, que provocan escozor en los ojos y sensación de asfixia, los agentes lograron que los manifestantes retrocedieran y ganaron espacio para poder establecer una zona segura desde la que poder intervenir. Algunos manifestantes lanzaron cócteles molotov, arrojaron ácido a los policías y dispararon material pirotécnico contra el helicóptero policial que sobrevolaba la zona.

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