Rosa Aguilar defiende la gestión de Llamazares y descarta sucederlo

La alcaldesa de Córdoba y responsable de Política Institucional de IU, Rosa Aguilar, dijo ayer que Gaspar Llamazares no es culpable de "los malos resultados" obtenidos por su federación en las elecciones generales y anunció que no se presentará como candidata a la Asamblea Federal -prevista para primavera-, después de que el líder de IU haya admitido que él no optará a la reelección.

En rueda de prensa, Aguilar señaló que el culpable de "los malos resultados" que han obtenido en las elecciones generales es "toda la organización" de IU porque los ciudadanos les han retirado la confianza al no atender lo suficiente el mensaje que dieron en elecciones anteriores. Según dijo, "las organizaciones ante la sociedad deben estar unidas, cohesionadas y con propuestas políticas claras; y en este tenor se ha llegado a las puertas de las elecciones en un espacio, como organización, de confrontación; y eso se paga caro porque la sociedad te vuelve la espalda".

La alcaldesa señaló que "no ha habido ninguna fuerza política que haya tenido que pasar un proceso de elección del candidato, tal como lo ha pasado IU, que no era en clave de pluralidad, sino de confrontación". Desde su punto de vista, "eso se paga en las urnas y no debe extrañar que sea así", por lo que consideró que lo que exige la ciudadanía a IU es "unidad y propuestas claras".

Aguilar comentó que quien pretenda ahora abrir en la organización una búsqueda de responsabilidad hacia alguna persona "se está equivocando de manera plena" porque "es el momento de diálogo, lealtad y voluntad política constructiva". "Es un gesto de honestidad y coherencia el realizado por Llamazares" dijo. "No esperaba menos de él porque es un político honesto y coherente" que "ha hecho un buen trabajo en el espacio parlamentario y ha estado dando la cara y trabajando durante la campaña".

La alcaldesa subrayó que "actuó con mucha responsabilidad" al tiempo que se mostró dispuesta a contribuir activamente a "un debate constructivo en el seno de IU", si bien dejó claro que "en ningún caso" está dispuesta a ser coordinadora general de IU porque ella se debe a Córdoba.

Al respecto, puntualizó que lo que le importa "no es quién sea coordinador, porque hay muchos compañeros con capacidad suficiente para dirigir IU, sino que el proceso de reflexión que se haga llegue hasta el final".

No obstante, Aguilar dijo que "es un motivo de satisfacción", desde su condición de mujer de izquierdas que tanto en las elecciones generales como en las autonómicas andaluzas haya salido derrotada la derecha. Además, apuntó que este contexto "va a permitir a IU, de una vez por todas, una reflexión profunda para poner todas las cuestiones encima de la mesa y decidir lo que convenga".

Señaló que este replanteamiento estratégico "es algo que, más pronto que tarde, debía de pasar" y que además se ha puesto de manifiesto que "ha avanzado el bipartidismo". También consideró que otro hecho objetivo es que "buena parte de la ciudadanía pensaba que la derecha podía ganar y que había que cerrarle el paso y no dejarla gobernar", lo que ha activado el voto útil y ha afectado a los resultados de IU. También aludió a la dificultad de la ley por el reparto de escaños, ya que, según dijo, "a IU un diputado le cuesta 450.000 votos y al PSOE y PP en torno a 70.000".