Pesar en el mundo de la danza por el repentino fallecimiento de Rosana Romero

El mundo del flamenco y la danza está de luto por el fallecimiento de la bailarina barcelonesa Rosana Romero. La artista murió en la jornada del pasado miércoles de manera repentina, causando un verdadero estupor entre compañeros de profesión y aficionados al baile.

Rosana Romero, de 46 años, había nacido en Barcelona y era licenciada en Grado Superior de Pedagogía de la Danza en la especialidad de baile flamenco, por el Conservatorio Superior María de Ávila de Madrid y Máster en Artes Escénicas por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.

Su trayectoria dancística comenzó a muy temprana edad, teniendo como maestros a artistas notables como Ángel Rojas, Carlos Rodríguez, Matilde Coral, Mario Maya, Eduardo Serrano “El Güito“, Manolo Marín, Javier Latorre, Eva Yerbabuena “, Merche Esmeralda, Florencio Campos o Antonio Canales.

En 1996 se traslada a Madrid, donde desarrollará su carrera profesional trabajando para diversas compañías, entre ellas las de Antonio Canales, con el que participa en obras como 'Torero', 'A Cuerda y Tacón0, 'Gitano', 'Amor Brujo', 'Bernarda Alba', 'Cenicienta' o 'Bailaor', por citar a algunas.

También formó parte de los elencos de las compañías de Paco Peña y Rafael Amargo, además de ser solista y repetidora de la Compañía Rubén Olmo, con los espectáculos “Belmonte”, “Pinocchio” y “Tranquilo Alboroto”.

Desde 2007 a la actualidad formaba parte de la compañía Estévez / Paños, donde también llevó a cabo trabajos como ayudante de dirección, bailarina principal y maestra repetidora en los espectáculos: “Flamenco XXI: ópera, café y puro”, “Sonata”, “Flamenco hoy de Carlos Saura”, “Preflamencos” “La Consagración”, “La Confluencia” y “EP cantera”.

Su inesperada muerte ha encendido las redes sociales con mensajes de cariño por parte de muchos artistas, desolados por la trágica noticia.

En Jerez tuvo especial participación en el Festival durante años, con las compañías citadas anteriormente, e incluso colaborando con compañeras de profesión como Concha Jareño, cuando trajo su primer espectáculo a la Sala Compañía, 'Algo'.