"Nuestros 'piercings' son el ejemplo de que la joyería está cambiando"
'Aristocrazy'
La marca de joyería más transgresora del mercado abre nueva tienda en el centro de Sevilla.
Su director creativo sostiene que los cánones clásicos han cambiado: "La mujer ya no espera a que le regale una joya el hombre, cada vez es más independiente, y los hombres también".
El hijo y sobrino de los creadores de la firma de alta joyería Suárez, ideó con sólo 25 años Aristocrazy, una firma de joyería adaptada a los nuevos tiempos. De hecho, ahora han lanzado piercings, aunque por supuesto no de acero; algunos incluso con diamantes. Este martes presentan nueva tienda en Sevilla, en el número 2 de la calle O’Donnell, muy cerca de La Campana.
-¿Cómo será la inauguración este martes?
-Realmente la tienda abrió la semana pasada pero hoy es la presentación a los medios. Será algo pequeño, dadas las circunstancias que estamos viviendo. ¡Ya nos hubiera gustado poder hacerlo por todo lo alto!
-Hace tiempo tenían tienda en la capital hispalense, pero cerraron. ¿Cómo se plantean el regreso?
-El local no era nuestro, se acabó el contrato y no quisieron renovarnos. Nos ha costado encontrar un local idóneo para la marca. Nuestra estrategia es abrir tiendas en las principales capitales y Sevilla es uno de los enclaves más importantes. Aristocrazy tiene gran reconocimiento en Andalucía.
-Alguna vez ha dicho que ahora las mujeres se compran ellas mismas sus joyas, no se las regala nadie.
-La mujer ya no espera a que le regale una joya el hombre, cada vez es más independiente, y el hombre también. Esos arquetipos eran de generaciones anteriores.
-¿Abrirán más puntos en Andalucía?
-Queremos abrir en Málaga. Estamos buscando tienda activamente pero sabemos que es una plaza complicada porque tiene mucha demanda. Quizás abramos en algún centro comercial.
-¿Cuáles son sus expectativas a largo plazo en esta Comunidad?
-Seguir creciendo y darnos a conocer más, ya que la marca sólo tiene diez años.
-¿A qué tipo de cliente se dirige ‘Aristocrazy’?
-Al final es el cliente el que nos elige a nosotros, y no al revés. Aunque claramente somos una marca que venimos a cambiar los cánones clásicos de la alta joyería y de cómo se venden joyas. Por tanto sí es cierto que nos dirigimos a un público más joven, al cual le queremos introducir en este mundo. Uno de los ejemplos de que la joyería está cambiando es nuestro universo piercing , en el que hemos conseguido con un producto muy joyero anillar directamente al cliente y ofrecemos una experiencia premium y personalizada.
-Con la pandemia, la venta ‘on line’ ha crecido notablemente. ¿Han notado esta tendencia?
-Hemos crecido mucho en on line, prácticamente duplicando nuestra cifra de negocio. Es una tendencia que ha venido para quedarse. Aunque el canal físico sigue siendo tremendamente importante para aguantar la venta on line.
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