De la cuna a los 27, esta joven es la gran influencia brasileña

Alta, de curvas perfectas, rubia, con los ojos azules y brasileña. Dicho así, podría parecer que Helena Bordon es una de las modelos del país de la samba, pero nada más lejos de la realidad, aunque su trabajo va en la misma línea. Helena tiene 27 años y ya es la it girl del momento en su país. Lleva toda la vida curtiéndose en el mundo de la moda desde debajo de las pasarelas, y su trabajo se ha saldado con una página web y una marca de ropa propias. Para eso no sólo hace falta estilo, sino un talento natural para acertar con los looks y buenos contactos. Y de eso Helena va sobrada.

Nació en São Paulo, y desde que sus tiernos ojos azules vieran la luz no ha parado de viajar allá donde la moda la llevase. Esto se debe a que su madre es nada más y nada menos que Donata Meirelles, la actual editora de estilo de la edición brasileña de Vogue, por lo que Helena ha crecido valorando prendas y modelos, sabiendo lo que se iba a llevar y lo que era preciso descartar para la temporada siguiente. Ha aprendido rápido, pero también tiene un talento innato para que todo lo que lleva puesto le siente como un guante. Los abrigos de entretiempo son su mejor arma para gustar a todos, los vestidos ceñidos se adaptan a su esbelta figura, tiene una gran colección de estilosas gafas de sol y mezcla los colores con gran maestría. Pero su éxito no se debe sólo a su aspecto, sino a que tiene un gran carisma, de ahí que no la llamen bloguera, ni "hija de" ni empresaria, sino socialité o it girl. Los que la conocen dicen que sabe cómo y con quién tiene que hablar en cada momento, y además es una chica decidida, pues siempre ha sabido a lo que quería dedicarse.

Su determinación y su buena posición social desde la cuna la llevaron a estudiar un curso de administración en Londres y a ser becaria durante un tiempo de Valentino, prestigioso diseñador que ahora es uno de sus fetiches. El resultado de esta formación son su página web y su marca de ropa.

Su página web se llama como ella, y posee una amplia gama de contenidos en portugués relacionados con la ropa, los cuidados, los eventos a los que acude y todo lo que se le pasa por la cabeza y es digno de escribirse. Por tanto, no es una egoblogger, o dicho de otra manera, una de esas blogueras cuyo único mérito es tomar fotos de sí misma estando impresionante. Frívola o no, ella tiene un objetivo claro que va mucho más allá de lucirse: quiere ser la Miroslava Duma de Brasil, y no le queda tanto camino por recorrer para alcanzar a la it girl rusa.

De momento ya impone su estilo y todos en el mundo de la moda hablan de lo chic y naturales que resultan sus looks. Por algo es la creadora, junto a sus dos mejores amigas de la infancia, de 284 Brasil, una marca de ropa "diridigida a un público joven y urbano que busca actitud, personalidad y versatilidad en todo lo que hace y usa". Bordon sabe que para ser un punto de referncia no basta con ser divina, sino que además hay que saber vestirlas a todas.