El Ayuntamiento pedirá a Hacienda poder hacer bajadas de impuestos a empresas y parados

El Ayuntamiento de Jerez pedirá al Ministerio de Hacienda un cambio normativo para poder hacer rebajas fiscales a las empresas y desempleados por la crisis del coronavirus así como una suspensión del plan de ajuste municipal, el documento que establece las medidas para reducir gastos e incrementar ingresos, hasta el 31 de diciembre.

Esta solicitud forma parte de un grupo de propuestas que la alcaldesa, Mamen Sánchez, tiene previsto enviar mediante carta tanto a la ministra María Jesús Montero como a la Junta de Andalucía. Entre ellas se encuentra también que se le autorice a decretar un aplazamiento en el pago de impuestos municipales y, a cambio, contar con una línea de préstamos para evitar problemas de tesorería.

Las medidas han sido consensuadas en la jornada de este miércoles y plasmadas en varias cartas durante una reunión que ha mantenido de manera telemática con representantes de la Confederación de Empresarios, CCOO, UGT, el Cluster Turístico y Horeca, así como con otros ediles del ejecutivo y técnicos municipales.

En cuanto a las medidas fiscales, el ejecutivo demanda una modificación de la Ley de Haciendas Locales para que puedan realizarse “reducciones en las tarifas y de tipos impositivos de los impuestos municipales”. De esta iniciativa se podrían beneficiar aquellas empresas y negocios que se vean afectados por la crisis y por aquellos ciudadanos que pierdan su puesto de trabajo. Ahora bien, demanda a su vez que se establezcan medidas de “compensación” a los ayuntamientos para evitar la pérdida de ingresos.

Hay que tener en cuenta que la gestión económica del Ayuntamiento de Jerez se encuentra intervenida por el Ministerio de Hacienda desde hace años. Por lo tanto, cualquier medida de calado en materia financiera que quiera aprobar el ejecutivo debe contar con el beneplácito de la administración central.

Por otro lado, ya el lunes este periódico avanzó que el Consistorio exigiría al Ministerio de Hacienda una "flexibilización" del plan de ajuste que ahora se concretado en una petición de suspensión de su aplicación hasta el próximo 31 de diciembre. Actualmente, este documento impide la adopción de medidas tales como bajadas de tributos ya que uno de sus objetivos es, precisamente, aumentar los ingresos.

Finalmente, demanda a Hacienda un nuevo fondo de pago a proveedores para poder reducir la deuda en facturas —hasta noviembre del pasado año el débito que arrastraba el Ayuntamiento superaba los 55 millones de euros— y una línea de crédito para atender otras obligaciones pendientes con el Consistorio como los impagos con la Agencia Tributaria y la Tesorería de la Seguridad Social—que rondan los 100 millones de euros—.

Asimismo, se mandarán dos cartas a la Junta de Andalucía, una dirigida al consejero de Hacienda, Juan Bravo, y otra al consejero de Economía, Rogelio Velasco. A ambos se les demanda, ademá de las iniciativas anteriores, nuevos planes de empleo así como que los ayuntamientos no tengan que asumir una parte de su coste como hasta ahora. Se reclamará también medidas de apoyo y de crédito a los comercios.

La alcaldesa comentó que estas medidas son necesarias para que el Ayuntamiento “pueda actuar con flexibilidad”. “Iremos tomando medidas día a día pensando en las necesidades sociales siempre que sean de nuestra competencia”, agregó.