Cojetusa avisa a los trabajadores que no hay dinero "ni para gasoil"

Los trabajadores de Cojetusa, concesionaria municipal del transportes público, celebraron ayer dos asambleas para ratificar la huelga de 24 horas que llevarán a cabo del 26 al 30 de octubre. Con una mayoría absoluta de votos y con la presencia de los empleados de todos los departamentos, la plantilla dio el 'sí' a estas movilizaciones por el retraso en el abono de las nóminas de septiembre. "Ya avisamos a la empresa el mes pasado que no esperaríamos tres meses para ponernos en huelga por los impagos", señaló ayer Juan González, secretario del comité, quien recalcó que "cuando nos reunimos con el director gerente de la empresa nos volvió a decir que no había dinero para pagar. De hecho, nos señaló que quizás los autobuses no lleguen a la huelga porque no hay dinero ni para el gasoil".

El comité declaró que "ya no es sólo que no cobremos a tiempo, sino que también tienen abandonado todo el material de la empresa". Lo cierto es que la cifra anual de viajeros ha tenido una importante caída desde el año 2000, "ahora hay alrededor de seis millones de usuarios, mientras que antes superábamos los nueve. Esto se debe a la mala organización de la empresa y las pocas ganas que tienen por apostar por esta concesión", declaró el secretario del comité, quien además mostró su preocupación por el transporte urbano de la ciudad porque "queremos que nuestros viajeros tengan un servicio digno, ya que reconocemos que ahora está en muy malas condiciones", señaló el secretario del comité.

De nuevo la 'sombra' de la venta de la concesionaria llega a los debates entre los trabajadores. Ante la incertidumbre de ser o no verdad, el comité lo tiene muy claro, "somos un cero a la izquierda para la empresa. Si es cierto que hay una negociación no se está contando con la opinión ni participación de los empleados. Esta actitud es otro de los motivos que se suman para que queramos ir a una huelga de 24 horas. Nos indigna que la empresa actúe así".

Cabe recordar que durante la última semana de septiembre, el comité negoció, en el Sercla, con la empresa la huelga que iban a emprender el 26 de dicho mes. "Al final cobramos a última hora y se desconvocó. Ahora no tenemos intención de negociar nada, o pagan o tiraremos para adelante con las movilizaciones", resaltó el portavoz, José María Romero, el pasado martes. Así las cosas, los empleados no "tenemos mucha confianza en que nos paguen antes de las movilizaciones", aunque en el caso de que así fuera "quedaría suspendida automáticamente la huelga prevista para final de mes", señaló el portavoz.