El Consistorio cede tres edificios a Onda Jerez para salvarla de otra quiebra

El consejo de administración de Jecomusa, la empresa municipal de comunicación que gestiona Onda Jerez Radio y Televisión, y la comisión del pleno de Presidencia aprobaron ayer, con el voto a favor del PSOE, el 'no' de IU y la abstención de PP y PSA, la ampliación de capital de la emisora pública jerezana mediante una aportación 'en especie' por valor de unos 4,9 millones de euros. Es la segunda vez en casi una década que se salva a Onda Jerez de la disolución gracias a una operación acordeón -reducción de capital social contra las pérdidas acumuladas y posterior ampliación- y, en esta ocasión, la fórmula para el reequilibrio se hallará gracias a la aportación de tres inmuebles que el Ayuntamiento cede gratuitamente a Jecomusa. La operación puesta en marcha en 2001, por valor de 3,5 millones, fracasó con estrépito, como queda corroborado con el incremento constante de las pérdidas de la emisora en la última década. Un ente público con un "déficit crónico y estructural difícilmente salvable a medio plazo", como reconoce en declaraciones a este medio el vicepresidente de Jecomusa y primer teniente de alcalde delegado de Presidencia, Casto Sánchez.

En conjunto, son casi 3.500 metros cuadrados de solares de titularidad municipal valorados en unos 4,9 millones de euros, aunque uno de ellos, el propio edificio que actualmente ocupan las instalaciones de Onda Jerez en calle Caballeros, dispone de un total de 3.573 metros cuadrados construidos. Éste ha sido tasado en 3,4 millones de euros. Los otros dos inmuebles hacen referencia a la conocida bodega La Chica, en calle Méndez Núñez (1.984 metros cuadrados) y valorada en 1,10 millones de euros; y a la nave auxiliar de mantenimiento de la estación de trenes (494 metros), cedida ya hace años al Consistorio jerezano por el consorcio ferroviario y tasada en unos 398.000 euros.

Esta ampliación de capital irá acompañada por un plan de acción para hallar nuevas vías de negocio que hagan rentable la sociedad, entre ellas, una línea de formación y la creación de un propio "libro de estilo" en el que los trabajadores de la empresa municipal, según detalló Casto Sánchez, "estén representados en el consejo de administración y puedan también contribuir a darle ese nuevo impulso a la sociedad". Con una deuda pendiente de pago a acreedores a 31 de diciembre de 2009 de 4,9 millones que puede llegar a los 6,5 millones a cierre del presente ejercicio y unas pérdidas acumuladas que rondan los 5 millones de euros, Sánchez insiste en que "no había otra salida viable para la sociedad, por lo que se resuelve un problema y no creamos otro, aquí no se pierde patrimonio, únicamente se coloca en otro sitio".

Desde IU, el único grupo municipal que hasta ahora se ha opuesto a la operación de ingeniería financiera, su portavoz Joaquín del Valle se mostró muy crítico con esta actuación de "maquillaje" económico. "Ya está bien de que el Ayuntamiento siga pagando los desmadres de los gobiernos municipales con la televisión, que a pesar de su abultada deuda sigue sin ser democrática, ni educativa, ni crea conciencia crítica, ni está al servicio del ciudadano. Si la utilizan como herramienta a su imagen y semejanza para hacer propaganda, que tengan la valentía de meter en los Presupuestos municipales cuánto nos cuesta realmente ese instrumento", enfatizó el candidato de IU a la Alcaldía en 2011. En opinión de Del Valle, "vuelven a reproducir las operaciones 'acordeón' de Pacheco, que ya hemos visto los resultados que dan, presentan un plan de acción que saben que no se cumplirá y ahora supongo que hipotecarán el edificio de Caballeros para hacer frente a la deuda y en unos años ya veremos...". Como propuso IU en su Plan de Viabilidad del Ayuntamiento, recuerda, lo "lógico es ir a la disolución, sentarse con los trabajadores y replantearnos el servicio de comunicación para de verdad hacerlo plural y cercano al ciudadano, con nuevas alternativas de programación".

Esta nueva operación se produce tras malograrse el acuerdo conjunto del pasado marzo, por el que el Ayuntamiento aportaba 17 millones de euros para rescatar mediante una ampliación de capital a Onda Jerez, Aguas de Jerez y Montes de Propios, todas ellas actualmente en quiebra técnica. En este caso, se aportaban terrenos del patrimonio municipal de suelo, algo que a la postre dificultó que el proceso llegase a buen puerto. Ahora, la salida para Onda Jerez pasa por la cesión de inmuebles, mientras que para Ajemsa, otra empresa en una situación extrema, se estudia otorgarle la concesión administrativa de la planta de reciclaje y compostaje de Las Calandrias. Ayer se informó de esta propuesta en el consejo de administración de Aguas de Jerez aunque no se votó, por lo que difícilmente podrá llegar al pleno de pasado mañana. Con un déficit de unos 90 millones de euros, esta salida para Ajemsa choca con el hecho de que actualmente la planta es explotada por la UTE Sufi-Verinsur, que tiene contrato hasta 2023.