El Ayuntamiento cerró el primer trimestre con 65,7 millones en facturas sin pagar

El Ayuntamiento cerró el primer trimestre del año con una deuda con los proveedores de unos 65,7 millones de euros, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Hacienda. Un año antes, tenía un adeudo pendiente de 74,3 millones.

A mediados de 2020, el Consistorio pudo rebajar su volumen total de facturas impagadas gracias a una importante inyección monetaria a través de una línea de crédito del Ministerio de Hacienda para ayuntamientos con problemas financieros. Esto le permitió que en junio la deuda total se situará en el entorno de los 60 millones tras haber alcanzado máximos en los meses precedentes al superar la barrera de los 80 millones.

Sin embargo, desde entonces volvió la tendencia alcista a estos adeudos situándose en una horquilla entre los 60 y los 65 millones. Este importe corresponde al global del grupo municipal, es decir, el pasivo comercial del Ayuntamiento, de las empresas municipales y de las fundaciones. Por el momento, el Consistorio no ha publicado los registros desagregados por cada organismo (los últimos datos hechos públicos en el portal de transparencia municipal datan de diciembre del pasado año).

Tal y como reflejan mes a mes estas cifras publicadas por el Ministerio de Hacienda, el Ayuntamiento jerezano continúa entre los ayuntamientos más morosos con sus proveedores. Con las cifras de marzo, el jerezano es el cuarto consistorio más endeudado de todo el país. Solo tiene más volumen de facturas impagadas las entidades locales de Madrid (165,8 millones), Jaén (74,3 millones) y Granada (68 millones). En la provincia, tras Jerez, el municipio con más deuda comercial es El Puerto, con unos 13,4 millones de euros en su debe.

Asimismo, Jerez está entre los ayuntamientos con un mayor periodo medio de pago (PMP). Este se situó a finales del primer trimestre en los 400 días desde que se supera el límite legal de abono de facturas (fijado en 30 días). Ahora bien, el ejecutivo lleva años señalando que esta magnitud está, de algún modo, distorsionada por una serie de facturas históricas sobre las que no hay acuerdo de pago. Por ello asegura que el PMP "real" más bajo del que realmente refleja esta magnitud oficial.

Según lo último apuntado por el gobierno, esta distorsión se atribuye fundamentalmente a unas facturas con la anterior concesionaria del servicio de recogida de basuras (la empresa Urbaser) sobre la que hay discrepancias sobre el importe adeudado, aunque se está obligado a contabilizarlas en este registro.

Eso sí, la evolución de la deuda corrobora que el Ayuntamiento sigue teniendo un problema estructural con su deuda con los proveedores, pues solo logra rebajarla de manera sustancial cuando recibe inyecciones extraordinarias de liquidez cuando se acoge a las líneas de crédito del Ministerio de Hacienda. De hecho, desde el balón de oxígeno recibido en junio, el volumen de facturas ha ido aumentando de manera progresiva, aunque haya habido algún que otro mes (como es el caso de enero) donde hubo una rebaja respecto al periodo precedente.

El ejecutivo confía en que estos adeudos puedan empezar a rebajarse de manera sustancial una vez el Ayuntamiento suscriba un nuevo préstamo con el Estado para liquidar la deuda histórica que se arrastra con la Tesorería General de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria y que a día de hoy ronda los 94 millones de euros. En este sentido, se confía en que este crédito permitirá que el Ayuntamiento pueda disponer de más liquidez en su tesorería para poder afrontar pagos de facturas al rebajarse notablemente el importe que tendrá que destinar para finiquitar este importante débito del balance municipal.