Diario de las artes
El difícil espíritu de lo nuevo
El anuncio realizado por la delegada provincial de la Consejería de Educación, Yolanda peinado, de que el Museo Arqueológico de Jerez abrirá de nuevo sus puertas el día 15 de próximo mes de mayo, tras casi seis años cerrado, ha sido acogido con total escepticismo por la Plataforma para la Defensa del Patrimonio, cuyo portavoz, José Montero, recuerda que "desde el año 2007 nos vienen dando nuevas fechas de apertura cada seis meses", pero asegura que "el día que se abra los primeros que van a estar allí para aplaudir vamos a ser nosotros".
Mientras que esto no ocurra, la plataforma pide que al menos se realicen exposiciones temporales "con piezas señeras que han sido descubiertas durante estos últimos seis años y que han cambiado la historia de Jerez". Montero se queja de que "estas piezas están escondidas y ni siquiera pueden verlas muchos investigadores que desearían hacerlo".
Asimismo, advierte de que "los vasos que han aparecido pueden ser reivindicados por el Museo Provincial de Cádiz o el de Córdoba, porque se trata de piezas califales y como son del Estado, podría disponerse que fueran a Cádiz, Córdoba o incluso al Museo Arqueológico Nacional de Madrid, como ocurrió con el jarrón nazarí que apareció en La Cartuja en 1927".
En este sentido, Montero recuerda que "el último Pleno municipal acordó por unanimidad pedir al Museo Arqueológico Nacional que le ceda temporalmente este jarrón nazarí para la reinauguración del Museo Arqueológico, algo que vale una fortuna traerlo sólo en portes y seguros".
Ante esta situación, la plataforma va a realizar un nuevo acto de protesta el próximo sábado día 15 a mediodía en la plaza del Arenal, donde sacarán a la calle diversas cartelas con algunas de las piezas más representativas del Museo Arqueológico. Realizarán una explicación sobre dichas piezas y continuarán recogiendo firmas para pedir al Ayuntamiento la reapertura del museo.
La plataforma insiste en que "desde que cerró sus puertas al público en abril de 2005 no hemos tenido oportunidad de ver, aunque fuese de forma temporal, las piezas que en él se guardan. Ni las halladas con anterioridad al cierre ni los importantes nuevos descubrimientos habidos en estos años de clausura". En este sentido señala que "todo esto ha creado un desconocimiento y a la vez un desinterés general por nuestro patrimonio, por interpretar nuestra historia y por este centro".
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