Fomento vincula la ampliación de la pista del aeropuerto a la demanda

Transportes

Resta trascendencia al informe de la Comisión de la Competencia que cuestionaba la obra alegando que “no es vinculante”

El aumento de pasajeros marcará si la inversión es viable

Pasajeros haciendo cola para facturar en el aeropuerto de Jerez.
Pasajeros haciendo cola para facturar en el aeropuerto de Jerez. / Miguel Ángel González

El Gobierno central vincula una ampliación de la pista de aterrizaje y despegue del aeropuerto de Jerez a que haya una mayor demanda de viajeros. Esa es la respuesta que ha dado a la diputada jerezana de Ciudadanos, Carmen Martínez, tras una pregunta formulada en el Congreso de los Diputados sobre esta inversión , cuantificada en algo más de 40 millones de euros.

En estos meses, el ente estatal Aena está tramitando el nuevo plan director del aeródromo jerezano, el documento que analiza las principales magnitudes y establece las líneas de actuación e inversiones para los próximos años. La ampliación de la pista en unos 900 metros aproximadamente es un proyecto que ya viene recogido en la planificación vigente, que data de 2001, pero que aún ni se ha ejecutado ni tiene fecha para hacerlo.

Sin embargo, la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia, en un informe que elaboró el pasado mes de julio sobre el plan director, cuestiona esta inversión al entender que no está justificada a tenor de los datos de tráfico actuales y las previsiones previstas en un futuro.

La pregunta de la diputada jerezana de Ciudadanos se registró días después de conocer el pronunciamiento del ente regulador y ya ha recibido respuesta del Ejecutivo. En ella le resta trascendencia al informe señalando que “no tiene carácter vinculante”. Ahora bien, tampoco garantiza que vaya a realizarse la inversión al vincularla a que haya una mayor demanda de estas instalaciones aeroportuarias.

En este sentido, recuerda que el plan director “no es un documento orientado a ejecutar inversiones” sino que es “un instrumento de planificación” donde “se fija el grado de desarrollo máximo previsible que deben poseer las instalaciones aeroportuarias para poder atender adecuadamente el tráfico aéreo previsto en su periodo de vigencia”. “Si el tráfico evoluciona con crecimientos mayores de los previstos se anticiparían las obras precisas, pero si la evolución del tráfico aéreo resulta menor de lo esperado se puede reprogramar el inicio de las obras”, añade el Gobierno central en la respuesta parlamentaria.

Aena plantea que en un futuro pueda ampliarse la pista en unos 900 metros al entender que esta inversión contribuiría a un aumento de pasajeros en La Parra. En este sentido razona que hay aeronaves que suelen operar en Jerez que no puede realizar la maniobra de despegue con su peso máximo, lo que limita su capacidad operativa.

Entre estos modelos se encuentran el Boeing 737-800 o los Airbus 320-200 y el 321-200, unos aviones que suponen más del 70% del tráfico actual del aeródromo jerezano. Por este motivo considera que, si se ampliase la pista, estos aviones podrían operar a su máxima capacidad y plantearse la posibilidad de acoger rutas más largas dentro del espacio europeo que, ahora mismo, no pueden realizarse —por la carga de combustible que se requiere fundamentalmente—.

En cambio, la Comisión Nacional de la Competencia considera que, aunque las previsiones de aumento de viajeros para los próximos años que realiza Aena son “conservadoras” —prevé un crecimiento anual que oscila entre el 1% y el 1,5%—, sus planes no pasan porque Jerez asuma vuelos de más recorrido. Es más, entiende que este tráfico puede ser asumido por aeropuertos que ya cuentan con las infraestructuras necesarias como son el de Sevilla o Málaga.

El plan director propone diversos escenarios de crecimiento aunque considera el más probable que en 2025 ronde los 1,4 millones de pasajeros, en 2030 los 1,6 millones y en 2035, 1,9 millones. Se prevé que este 2019 se superen los 1,1 millones alcanzados el pasado año.

Finalmente, la mercantil estatal explica en la respuesta parlamentaria que tiene “un mecanismo de seguimiento constante de los planes directores de los aeropuertos que conforman su red para atender siempre de forma eficiente las demandas de movilidad y que no se limite la posibilidad de atender incrementos de tráfico en ellos”.

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