El Ayuntamiento calcula que la crisis del coronavirus le supone un impacto de 6,6 millones
Es la estimación inicial que ha comunicado a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal
Prevé, además, perder unos 1,5 millones de euros en ingresos
La Airef aprecia mejoras en la situación financiera municipal, pero sigue catalogando su situación de "crítica"
En torno a 6,6 millones de euros es el impacto que la crisis del coronavirus puede tener en las cuentas de este año del Ayuntamiento jerezano, según una primera estimación realizada por el gobierno local y comunicada a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), un órgano independiente encargado de velar por el cumplimiento de estabilidad en las administraciones públicas.
Esta estimación aparece en un informe publicado semanas atrás por el órgano independiente donde realiza un análisis de la ejecución presupuestaria, deuda pública y regla de gasto de las principales corporaciones locales del país. En él, se apunta que el Consistorio jerezano, además de este impacto en su gasto, estima que la caída de la actividad económica por la pandemia le reportará en este ejercicio unas pérdidas de 1,5 millones en materia de ingresos.
Esta entidad pidió meses atrás a las entidades locales una previsión sobre el impacto económico que van a tener en sus cuentas las medidas que han adoptado para hacer frente a la covid-19, así como de la repercusión en la recaudación de la caída de la actividad económica durante esta situación extraordinaria.
Otras entidades locales del país han declarado pérdidas de ingresos no superiores al 2% y un coste del 1,4% de media para sus presupuestos. En el caso del Ayuntamiento jerezano, se estima una disminución del 0,7% de los ingresos no financieros por la reducción de la actividad económica y en cuanto a los gastos se estima un coste añadido del 3,3%, por encima, por tanto, de la media nacional. Eso sí, en el informe no se aportan cuantías sino porcentajes, de ahí que las estimaciones aparecidas en este artículo hayan sido calculadas en base al presupuesto de 2019, que era el que estaba en vigor en el momento que se hizo la comunicación a la Autoridad Fiscal.
Ya este medio publicó en junio que la suspensión de eventos, como el caso de la celebración de la Feria del Caballo, iba a suponer una reducción de unos ingresos de unos 1,5 millones de euros. Además, al poco de decretarse el estado de alarma, a mediados de marzo, el Ayuntamiento aprobó una serie de rebajas fiscales para algunas tasas (mercadillos y veladores fundamentalmente) puesto que tiene bastante limitada esta posibilidad debido a que la ley se lo impide por su complicada situación financiera.
En cuanto al capítulo de gastos, el Ayuntamiento ha tenido que dar cabida en su presupuesto a importes no previstos inicialmente para incrementar las ayudas sociales, la atención a personas sin hogar o la adaptación o desinfección de espacios públicos, por citar algunas medidas apuntadas por el ejecutivo en los últimos meses.
La Airef reconoce, eso sí, que a día de hoy es difícil conocer el “impacto” que esta crisis tendrá en las economías municipales debido a numerosos factores, entre ellos la “extensión e intensidad de la pandemia”, así como la "posible falta de homogeneidad en las hipótesis manejadas por cada una” de las entidades locales a las que realiza un seguimiento sobre su situación económico-financiera.
En situación crítica, aunque con mejora de la calificación
En el informe, que se publica semestralmente, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal realiza una estimación sobre la mejora o el empeoramiento de la situación económica de los principales ayuntamientos del país. En cuanto a Jerez, sigue incluyéndolo dentro del grupo del nivel de riesgo crítico, la peor calificación de su informe. En ella están junto al de Jerez los consistorios de Jaén y Parla ya que considera que son entidades cuya reversión a una situación financiera sostenible no es posible a medio o largo plazo.
Ahora bien, sí destaca que ha habido una cierta mejora en los parámetros que utiliza para calificar la situación de cada corporación. Así, con datos correspondientes a diciembre de 2019, valora que se haya reducido el remanente negativo de tesorería y el saldo de las operaciones corrientes, así como que en ese momento hubiera reducido los tiempos de pago de facturas a proveedores con respecto al informe anterior. Meses más tarde, en cambio, y vinculado también a la crisis del coronavirus, ha vuelto a empeorar esta magnitud.
También te puede interesar
Contenido ofrecido por El Centro Inglés
Contenido Patrocinado
Especial