"En Jerez se cerrarán como mínimo entre 25 y 30 camas y no sabemos si será un cierre permanente"

Jerez/La finalización este viernes 31 de mayo de los contratos de refuerzo del SAS y su no renovación ha provocado la rebelión de sanitarios y sindicatos en Jerez. A pesar de que los profesionales suelen guardar silencio, el empeoramiento de la situación ha provocado que algunos colectivos hagan públicas sus denuncias, como ha pasado con enfermeros de la UCI de Jerez que este viernes aseguraron que no pueden callar más.

José Antonio Aparicio es delegado de la junta de personal del Hospital de Jerez y confirma, en declaraciones a Diario de Jerez, el mal pronóstico que tiene la sanidad si siguen adelante los recortes que denuncian. En primer lugar, califica de "inapropiado y, además, una falta de respeto hacia los profesionales la forma en la que proceder administración". Se refiere a la toma decisiones y la forma de comunicarlas a la plantilla: "Un 30 de mayo lo comunica a las organizaciones sindicales pero los profesionales nos hemos ido alterando a lo largo de la tarde para a través de nuestros cargos intermedios, que son los que comunican el cierre de un importante número de camas".

Aparicio señala, como ejemplo, que desde este sábado 1 de junio "las urgencias pediátricas dejan de tener tres auxiliares por turno para tener dos". "Ahí ya no estamos hablando de ratio porque yo cierro cama y necesito menos personal, ahí estamos hablando de que hay una política economicista que impera por encima de la política que debe de imperar, que es del servicio público y de dar una calidad asistencial que garantice los derechos mínimo que tienen los pacientes".

El delegado de la junta de personal detalla otro ejemplo de lo que ocurre en estos momentos en el Hospital de Jerez, de manera previa a la no renovación de contratos: "Ahora se está llamando para hacer las ecos que solicitaron médicos especialistas en mayo del 2023. Estamos hablando de un año de espera". A su juicio esto es una muestra más de cómo "progresivamente esta dirección, y fundamentalmente la dirección de enfermería, aplica criterios que se le pueden aplicar una empresa privada porque el objetivo es el beneficio. Sin embargo, "el objetivo de nuestro servicio debe ser garantizar la salud de los ciudadanos".

En este sentido, Aparicio reconoce que es entendible "hacer una gestión en la que genere un gasto controlado y vigilado, pero estamos hablando de las listas de esperas cada vez más grandes y de que Urgencias está colapsada como consecuencia de que no hay camas libres para hacer el trasvase a las distintas unidades de hospitalización". "Esto ha sido así con todas las camas abiertas, imaginad a partir de este 1 de junio cómo va a ser la saturación", advierte.

"Nos da la sensación de que esto se ha hecho, además, con alevosía y premeditación y no sabemos si con nocturnidad. Como profesionales que estamos en el día a día trabajando en el centro no aceptamos que un Hospital como el nuestro pierda recursos y que se deteriore más la imagen de nuestro servicio", asegura el delegado de la junta de personal.

Asimismo, alerta que estas actuaciones por parte de la dirección "provocan que los pacientes y los familiares lleguen alterados a los servicios, agrediendo en algunos casos física y verbalmente a nuestros profesionales, porque la situación que soportan de espera es insostenible".

Consecuencias de la finalización de los contratos en Jerez

"Evidentemente hay una política que vendrá marcada de Sevilla pero queremos saber hasta qué punto Sevilla marca la política a la dirección del Hospital de Jerez, puesto que la dirección del Hospital está haciendo encaje de bolillo con el personal", afirma.

A pesar de que no hay datos oficiales, Aparicio calcula que "al menos 55 enfermeros se pierden en todo el área de gestión sanitaria. Son 55 profesionales que venían desempeñando unas funciones desde marzo de 2020, por la necesidad que genera la pandemia, pero se ha demostrado que estaban tapando huecos por la necesidad que había".

"Se está demostrando que la demora tanto en hospitalización, como en pruebas diagnóstica e intervenciones quirúrgicas están disparados y los tiempos en urgencias de pacientes esperando una cama para hacer hospitalizados están también por encima de lo que de la media que se puede soportar en un hospital público", detalla, añadiendo que con estos datos "no entendemos cómo la dirección del centro se permite el lujo de ser mucho más austero y hacernos un recorte".

A esto se une que "aunque nadie se atreve a confirmarlo, hemos escuchado de viva voz por mandos intermedios de que el cierre de camas previsto no tiene como fin exclusivamente el periodo estival y las vacaciones sino que puede ser permanente todo el año".

En el caso del Hospital de Jerez, "como mínimo estamos hablando de entre 25 y 30 camas. Ya nos llamó la atención en un Hospital ya saturado en marzo se decidiera cerrar determinadas camas del área de Traumatología, que tiene una lista de espera interminable. Claro, esa es la política que están extendiendo a todos y cada uno de los servicios". Mientras tanto, "se lanzarán a la política de conciertos, conciertos que a los que no le hemos visto un rendimiento desde el punto de vista de depuración de las listas que siguen creciendo".

Con todo ello, desde la junta de personal "exigimos, primero, que se retome la situación y que se hagan las cosas con tiempo y con pausa pero, sobre todo, con garantías. Los trabajadores tienen derecho a ser informados de manera adecuada y los pacientes a ser atendidos a tiempo".