La Fiscalía pide más de 12 años de prisión por matar a una mujer y arrojarla a un contenedor en las Casitas Bajas

La Fiscalía pedirá casi 13 años de prisión para José Carlos M.G., el presunto autor del homicidio de Regina V.V., una mujer cuyo cuerpo apareció en el interior de un contenedor de las Casitas Bajas, en el polígono de San Benito, en la madrugada del 19 de julio de 2020. Junto a él se sentará en el banquillo Jesús P.B. que, según el relato del fiscal, le ayudó a depositar el cadáver de la víctima, que previamente había sido ocultado con una colcha y atado con unas cuerdas, en el interior del bidón.

El juicio por estos terribles hechos se celebrará a partir del próximo día 16 de este mes en la sede jerezana de la Audiencia Provincial (sección octava). En un principio, se han previsto ocho sesiones en la vista oral que se celebrará con jurado, tal y como marca el procedimiento judicial para este tipo de casos penales.

En su escrito de calificación provisional, adelantado por Canal Sur Radio durante el pasado fin de semana, la Fiscalía califica de homicidio lo acontecido en la madrugada del 19 de julio en el interior de la vivienda de la calle Tempranillo, en la zona de las Casitas Bajas. Así, explica que la víctima, había acudido a la vivienda del principal acusado, donde permaneció varios días. Pero, durante la madrugada del 19 de julio de 2020, José Carlos M.G, uno de los acusados, subió a la habitación donde se encontraba la mujer, que tenía 39 años de edad, y la mató presionándole la boca y la nariz “con su mano o con algún tipo de prenda” hasta provocarle la asfixia (la muerte se produjo debido a un edema pulmonar).

Tras matarla, el ministerio público apunta que el principal acusado envolvió a la mujer en una colcha y la sujetó con tres cuerdas. Tras esto, portó el cuerpo fuera de su domicilio y trató de arrojarlo a un contenedor de basura que estaba a pocos metros de su vivienda, en la calle Cepa. Sin embargo, al no tener fuerza suficiente, pidió ayuda al otro acusado, Jesús P.B., quienes acabaron depositando el cadáver en el depósito de residuos.

Ahora bien, minutos más tarde, ambos fueron interceptados por unos agentes policiales cuando caminaban por la avenida Tomás García Figueras pudiéndose así recuperar rápidamente el cuerpo de la víctima. Al parecer hubo vecinos de la zona que alertaron de que habían visto a ambos arrojando al interior de un contenedor lo que parecía el cuerpo de una persona.

La Fiscalía sostiene que los acusados, en el momento de los hechos, no se encontraban con “síntomas de intoxicación aguda por consumo” de drogas ni padecían "síndrome de abstinencia” por lo que concluye que eran plenamente conscientes de lo que estaban realizando.

De este modo, para José Carlos M.G, que era el propietario de la vivienda donde ocurrieron los hechos, pide que sea condenado por un delito de homicidio y otro contra los sentimientos religiosos y respeto a los difuntos. Por el primero, reclama en este escrito de acusación provisional una pena de 12 años 6 meses de prisión y por el segundo otros cinco meses. Este se encuentra en prisión preventiva desde que fue puesto a disposición judicial días después de ser detenido por lo ocurrido en su vivienda del polígono de San Benito.

También el ministerio público reclama que el principal acusado indemnice a los familiares de la víctima (tenía una hija de corta edad). Así, plantea una responsabilidad civil de 100.000 euros para la menor, otra de 8.000 euros para cada uno de los hermanos y 30.000 a los padres de Regina V.V.

Mientras, la Fiscalía plantea cinco meses de prisión para Jesús P.B. por un delito de encubrimiento. Este último ha permanecido en libertad con cargos desde que fue puesto a disposición judicial tras haber sido detenido por estos hechos.