Linde acaricia el "inicio" de la recuperación económica

Primero fue el dato del avance de crecimienjto del PIB del tercer trimestre -el esperanzador 0,1%- y luego, la nueva oleada de la Encuesta de Población Activa (EPA), que arroja en el segundo trimestre una reducción de parados, un aumento de ocupados y una desaceleración "importante" del incremento de la tasa de desempleo, que cae al 2% frente al 16% de hace un año y el 5% del primer trimestre.

Para entrar en recesión son necesarios, al menos, dos trimestres consecutivos de caída del PIB. Pero el más mínimo atisbo de recuperación económica es recibido con regocijo tras seis largos años de crisis. Con la debida cautela, el gobernador del Banco de España, Luis María Linde, cayó en la tentación ayer de descifrar el posible cambio de ciclo, no sin advertir de los muchos riesgos que aún pesan sobre la ansiada recuperación económica española, cuyos primeros indicadores favorables tienen pies de barro.

El responsable del supervisor del sistema financiero español dedicó la primera parte de su intervención en el Congreso Nacional de la Empresa Familiar, que se celebra en Jerez, al análisis de los últimos indicadores que, "con toda prudencia" y por los últimos datos macroeconómicos, "hacen pensar que España puede estar al comienzo de la recuperación económica".

Para Linde, la recuperación, que se sustenta principalmente en las exportaciones, es resultado del "gran esfuerzo de corrección de los desequilibrios llevado a cabo", si bien advirtió de que los riesgos de no cumplir las expectativas no sólo radican en el ámbito de lo económico, ya que la seguridad jurídica y la estabilidad política "son piezas cruciales" para ello.

En su análisis de los últimos datos que apuntan a una recuperación económica, el gobernador del Banco de España destacó la aportación de las reformas puestas en marcha por el Gobierno, las fiscales, la corrección del déficit público y, en particular, la del mercado laboral, reformas "de las que se comienzan a ver ya los efectos positivos".

Según Linde, ahora se puede empezar a crear empleo con menores tasas de crecimiento de las que necesitaba la economía española en el pasado. "El umbral puede haberse rebajado (...) lo que debería impulsar una corrección del desempleo con tasas de crecimiento del PIB más moderadas", dijo Linde, quien subrayó el importante papel que ha tenido la moderación salarial desde mediados de 2012, "más acorde con la recuperación económica".

En cualquier caso, el gobernador recordó que, "pese a la contención de los costes laborales, el desempleo es el más grave de nuestros desequilibrios y el que muestra la mayor resistencia a la contracción", en buena medida por la "excesiva dependencia" del sector del ladrillo, de ahí que entre los grandes retos a los que se enfrenta la economía española, Linde citara la necesidad de "conseguir que otros sectores tomen el relevo en la creación de valor añadido".

El gobernador destacó igualmente los avances, "en condiciones muy difíciles" por la recesión, de la contracción del déficit público, si bien avanzó que los datos disponibles apuntan igualmente a "una contracción menos intensa del crédito para las empresas".

En este sentido, Linde puntualizó que del flujo de la financiación dependerá también "la solidez de la recuperación", al tiempo que apuntó que para que el crédito fluya, es necesario que la economía mejore y concluya la reforma del sistema financiero español.

En opinión de Linde, también se han adoptado medidas que pueden tener un impacto positivo en el acceso a la financiación de las pequeñas y medianas empresas, caso de la ampliación de la definición de pymes y de la Ley de Emprendedores. Sin embargo, el gobernador criticó algunas de las "ideas manejadas" para favorecer un flujo de crédito a las pymes y que son "poco realistas", ya sea "por su complejidad técnica", ya sea "por su dificultad económica" o "por ambas cosas a la vez".

Precisamente, el "fortalecimiento" de la banca y su papel en "el inicio de la recuperación" ocuparon el final de la intervención del responsable del supervisor bancario, tarea "prioritaria" en la labor del Banco de España y de la que elogió el esfuerzo realizado por las entidades para afianzar su saneamiento desde la "transperencia" de la que ahora hace gala el supervisor.