Análisis
Santiago Carbó
Algunas reflexiones sobre las graves consecuencias de la DANA
Educación
Diferentes organizaciones educativas de la provincia de Cádiz han firmado un manifiesto en el que vuelven a solicitar la bajada de la ratio en la Escuela Pública Andaluza.
La intención es reducir el número máximo de niños y niñas que forman el grupo clase atendido por un/a maestro/a o profesor/a, o dicho de otra manera más profesorado y menos alumnado por aula, es la medida más adecuada para poder hacer una enseñanza más personalizada y atender a la diversidad, respetando además la distancia social mientras sigan los efectos de la crisis del coronavirus, pero recuperando la cercanía personal y la convivencia emocional.
Esta es una medida, la bajada ratio, largamente reclamada por la comunidad educativa y sobre la que existe un amplísimo consenso entre los expertos y todas las organizaciones y colectivos del mundo de la educación.
Pero lo que ha puesto en evidencia su eficacia ha sido el difícil contexto del curso 2020 -2021, donde la combinación de una bajada de ratio motivada por las modalidades de semipresencialidad de una buena parte del alumnado, junto a la contratación de un importante número de profesores y profesoras de refuerzo para permitir desdobles que hicieran posible la presencia de los más pequeños en las aulas evitando riesgos de contagio, han demostrado un alto grado de efectividad para llevar a cabo una atención más personalizada, una mejora de la convivencia y del aprendizaje con la consiguiente reducción del fracaso educativo. En definitiva, un aumento de la calidad.
Sin embargo, en el nuevo curso 21-22, a pesar de contar con más medios económicos, la consejería de Educación de la Junta de Andalucía ha procedido a la no renovación de los contratos de 2.700 enseñantes, los llamados “refuerzos covid” y continúa con el cierre y supresión de líneas en los centros de la región, como ha denunciado recientemente un sindicato de trabajadores de la enseñanza: 239 aulas menos de Infantil y Primaria en Andalucía.
Pero es precisamente, el descenso de la natalidad que reduce el número de niños y niñas que llegan a los colegios andaluces y la disposición de más fondos que invertir en Educación, lo que posibilita una rebaja de ratio en nuestros colegios e institutos. Una medida que permitiría el curso próximo comenzar una reducción de ratio y esa añorada atención personalizada, especialmente necesaria para el alumnado que más ha sufrido las consecuencias de dos cursos muy difíciles afectados por la Pandemia. Y especialmente todo el alumnado con NEAE.
Marea Verde entiende que "el presupuesto en Educación más que un gasto es una inversión. Rebajar los índices de abandono escolar temprano o el fracaso educativo, además de ser un objetivo de progreso social, supone una inyección de riqueza y capacidad para nuestra comunidad y a la postre, un ahorro presupuestario.
Por esta razón, el movimiento de la Marea Verde y el conjunto de los colectivos, asociaciones y sindicatos que suscribimos esta petición, más allá de las diferencias que puedan separarnos en otros aspectos, "entendemos el derecho a la educación también como el derecho de todo el alumnado a aprender con éxito, al margen de su origen o condiciones socioeconómicas, culturales o de índole personal. Y exigimos a la Consejería de la Junta de Andalucía la rebaja de ratio como un medio incuestionable para conseguir estos objetivos educativos".
También te puede interesar
Lo último
1 Comentario