Ana María Orellana, distinguida con la Cruz de Honor de la Orden de San Raimundo de Peñafort

Jerez/La académica numeraria Ana María Orellana Cano ha sido distinguida con la Cruz de Honor de la Orden de San Raimundo de Peñafort, una condecoración concedida por la ministra de Justicia, Pilar Llop Cuenca, en atención a los méritos y las circunstancias que concurren en su persona.

Ana Orellana fue la primera mujer magistrada especialista de lo Social de España, habiendo obtenido el número 1 de su promoción en las oposiciones restringidas, celebradas en el año 1990. Desde el año 2019, presta sus servicios profesionales como magistrada especialista de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Es la primera magistrada – y, la única hasta ahora-, académica de Número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España y, la cuarta mujer que accede a esta condición, desde la constitución de la Real Academia en el año 1730. Es miembro nato del Instituto de España y preside la Sección Octava de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Corporación Nacional.

Su vida académica es muy intensa, ya que pertenece también como académica de Número a esta Real Corporación, así como a la Real Academia Sevillana de Legislación y Jurisprudencia. Es presidenta del Consejo General de la Mutualidad General Judicial y, miembro de la Comisión Rectora.

Ana Orellana nació en Jerez y es una enamorada de su tierra, habiendo mantenido, en todo momento, su domicilio en esta ciudad, a pesar de las responsabilidades que ha asumido, realizando su labor profesional en Madrid, fundamentalmente. Su familia, -como reiteradamente ha declarado-, constituye el eje de su vida. Está casada con el fiscal jefe de Área de Jerez, Francisco García Cantero, tienen cuatro hijos, - Ana, Borja, Alfonso y Gonzalo-, una nieta, Ana y, otra que nacerá muy pronto.

Ha dedicado los últimos 34 años de su vida a su profesión como magistrada, poniendo sentencias ininterrumpidamente y, sin solución de continuidad, siempre intentando conciliar su vida profesional, con la vida familiar, en la que se ha dedicado muy especialmente también, al cuidado de sus padres, Alfonso y Tana, al igual que lo hicieron sus hermanos, Alfonso y Nuria, con los que está muy unida. Por esta razón, destacan entre sus publicaciones, numerosas de ellas dedicadas al examen de la importante labor social que realiza la mujer trabajadora y, las dificultades que conlleva el ejercicio del derecho a la conciliación de la vida familiar y profesional.

En este contexto, es difícil resumir toda una vida dedicada a la jurisdicción social, pero conviene resaltar que ingresó en la Carrera Judicial, en el año 1988, por oposición y, como ha demostrado, también por vocación. Desde 1990, ha prestado ininterrumpidamente sus servicios profesionales en el orden jurisdiccional social. En un primer momento, en el Juzgado de lo Social de Jerez de la Frontera, lo que le permitió conocer la problemática del mercado laboral jerezano; después, desde el 15 de junio de 1994, en la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, con sede en Sevilla; y, actualmente en la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.

Siempre movida por la búsqueda de la excelencia jurisdiccional en beneficio del justiciable y de la Administración de Justicia, se ha esforzado porque los órganos judiciales en los que ha prestado sus servicios tuvieran la menor tasa de pendencia posible, habiendo sido ponente, como titular y en comisión de servicios, en más de 14.000 sentencias y, habiendo intervenido en la deliberación de casi 40.000 sentencias.

El interés por mejorar su formación, con el objetivo de mejorar la calidad de su trabajo judicial, la llevó a doctorarse en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid, con la tesis doctoral sobre «La problemática laboral en el concurso de acreedores», que fue calificada con Sobresaliente Cum Laude por unanimidad.

Su inquietud por el estudio data de una edad muy temprana, destacando por sus calificaciones como alumna del Colegio de la Compañía de María y, después del Colegio El Cuco, hasta obtener la máxima nota de España en el Examen de Selectividad, en la rama de Ciencias Puras. Siempre vinculada a su ciudad natal, estudió la Carrera de Derecho en la Facultad de Jerez de la Frontera, donde fue el Número 1 de su promoción, obteniendo el mejor expediente académico en la promoción 1980/1985.

Desde marzo de 2009 es analista del Centro de Documentación Judicial, CENDOJ, habiendo analizado más de 4.000 sentencias de las Salas de lo Social de los Tribunales Superiores de Justicia de Madrid, Castilla La Mancha, Extremadura, Galicia, Murcia y Andalucía, en sus tres sedes, Sevilla, Granada y, Málaga.

En diciembre de 2008, le fue concedida por el Ministerio de Justicia, la Cruz Distinguida de Primera Clase de la Orden de San Raimundo de Peñafort, al mérito judicial; y, le fue otorgado el Premio Nacional a la Mejor Laboralista del año 2009, por la Asociación Internacional de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social.

Durante 15 años compatibilizó la Carrera Judicial con la labor docente en la Escuela de Relaciones Laborales y en la de Trabajo Social de Jerez. Actualmente es la directora del Máster de Alta Especialización en Relaciones Laborales de la Universidad Complutense de Madrid. Es la Directora Académica del Consejo General de Colegios Oficiales de Graduados Sociales de España y, la subdirectora de la Cátedra de Derecho Internacional del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad Católica San Antonio de Murcia.

Es autora de más de cien publicaciones jurídicas, ha impartido más de 300 conferencias, ha dirigido y coordinado más de 30 Cursos; ha sido profesora de 48 másteres; y, ha recibido más de 200 cursos de formación. También ha sido profesora de másteres y cursos de postgrado, organizados por universidades extranjeras. De especial relevancia fue el Máster de Derechos Humanos que impartió en la Universidad Tres de Febrero en Buenos Aires, invitada por el Tribunal Supremo de Argentina.