Nueva York le pone caras al jerez
La fotógrafa jerezana María Higuero expone en la Gran Manzana 'Divino Jerez', colección de 33 retratos en torno a los vinos del Marco.
La fotografía sirve de vehículo a la fotógrafa jerezana María Higuero para plasmar las emociones que evoca una copa de Jerez a través de los retratos de una treintena, 33 para ser concretos, de conocidos personajes de la ciudad. 'Divino Jerez' es el nombre de la colección que la artista jerezana mostró por primera vez en su ciudad natal en 2015 y que ahora expone en Nueva York.
Bodegueros, artistas del flamenco, políticos y otros personajes de la sociedad civil, la mayoría de ellos portando una copa de jerez, conforman la muestra, inaugurada el martes por la noche en La Nacional, sede de la Sociedad Benéfica Española creada hace 150 años, y que en su conjunto "hacen un retrato único", explica la fotógrafa.
Con esta exposición, que se enmarca dentro de las actividades organizadas por el colectivo de los Sherry Eplorers con motivo del congreso de la Federación de Asociaciones Españolas en Estados Unidos (Faeusa), Higuero quiso "ponerle cara al vino", pero también "sentimiento".
"Quiero que (los retratos) me den sentimiento, emociones. Cuando hago las fotos me emociono, como si estuviera enamorada, y eso es lo que quiero que sienta la gente: quiero despertar sentimientos", señala la artista jerezana.
Toreros como Juan José Padilla, cantaores como Capullo de Jerez, periodistas como Paco Lobatón y representantes de las familias bodegueras de Jerez integran la colección de retratos, unos en blanco y negro y otros en color, porque como dice la autora, "me hablan las fotos" y "Capullo de Jerez tiene que ir en blanco y negro porque me lo estaba pidiendo; Padilla tiene que ir en color".
Higuero, que lleva cuatro años en el mundo de la fotografía profesional, siempre buscó que los personajes retratados se expresaran en sus propias cavilaciones, evitando mirar a la cámara porque, "cuando posas estás perdiendo el alma".
La colección comenzó con la fotografía del bailaor Antonio "El Pipa", la toma que menos tiempo le costó, mientras que a la que más horas dedicó fue a la cantaora Tomasa Guerrero, 'la Macanita', porque "se trajo tres o cuatro mantones". Pero su retrato favorito, confiesa, es el de Juan José Padilla, al que fotografió tras la grave cornada que sufrió en 2011 y que le costó la pérdida de un ojo. "Me conmovió, me demuestra que sí se puede, el esfuerzo, el tesón, la valentía y la pasión", sostiene.
María Higuero comenzará pronto con un nuevo proyecto de una exposición temática, a propuesta de Cáritas de Jerez, que le ha pedido retratar "la misericordia". Se trata de "un proyecto muy bonito".
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