La Policía Nacional sorprende a un hombre en pleno robo en un comercio de la calle Évora
Agentes de la Policía Nacional han frustrado el robo en una tienda ubicada en la calle Évora perpetrado por un individuo que fracturó la luna del escaparate con un adoquín de grandes dimensiones. El presunto autor fue detenido en la confluencia de la calle Corredera tras tratar de huir a la carrera cuando fue interceptado por los agentes que acudieron al lugar después de recibir varias llamadas alertando del suceso.
Estas llamadas a la sala del 091 se produjeron sobre las cuatro de la mañana e informaban sobre fuertes golpes que estaban escuchando provenientes de la vía pública entre las calles Évora y Medina. Una patrulla cercana a la zona, formada por agentes uniformados y de paisano, se distribuyó para prevenir un posible intento de fuga, como efectivamente se produjo.
Los policías uniformados nada más internarse en la calle peatonal observaron que un establecimiento presentaba la cristalera totalmente fracturada, con una de las vitrinas tirada en el suelo y con el interior totalmente revuelto. En ese momento, del interior de la tienda salió a la carrera un joven con tal ímpetu y rapidez que eludió el intento por detenerlo. Los policías emprendieron la carrera tras el sujeto y comunicaron por radio lo que estaba ocurriendo, cuando el individuo alcanzó el cruce con la calle Corredera los agentes de paisano ya le estaban esperando, pudiendo interceptarlo y detenerlo como presunto responsable de un delito de robo con fuerza para ser trasladado inmediatamente hasta las dependencias de la Comisaría de la Policía Nacional en la Plaza del Arroyo donde quedó ingresado en calabozos.
Los operadores de la sala del 091 contactaron con el propietario del negocio para comunicarle lo sucedido y que desplazara hasta el lugar para hacerse cargo del negocio. En el interior de la tienda los agentes encontraron el adoquín de grandes dimensiones que el detenido presuntamente utilizó para poder romper el cristal.
El arrestado, natural y vecino de Jerez y al que le figuran seis detenciones previas, cinco de ellas por otros robos con fuerza en la ciudad, fue puesto a disposición de la Autoridad Judicial en funciones de guardia tras confeccionarse el preceptivo atestado policial.
La intervención fue realizada por agentes integrantes del servicio de la Unidad de Patrulla de Paisano (Linces) y por policías del Grupo de Atención al Ciudadano GAC (radio patrullas).
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