Protocolo ANEAE
Centro del profesorado de Jerez
Más de 7500 alumnos y alumnas, en Andalucía, presentan necesidades educativas especiales asociadas a discapacidad y alteraciones y trastornos graves del desarrollo o la conducta, incluyendo los trastornos del espectro autista, y, en torno a 14000, son los que tienen necesidades específicas de apoyo educativo. Nos estamos refiriendo a alumnado con dificultades de aprendizaje, con un rendimiento inferior o superior al esperado por su edad o nivel educativo, con diferentes ritmos y estilos de aprendizaje, con altas capacidades intelectuales, o, que demanda acciones de carácter compensador por presentar desigualdades de partida.
Como podemos ver es un panorama variopinto que nos dibuja una escuela de la diversidad, que ha de detectar todas estas necesidades que el alumnado pueda presentar, identificarlas e informarlas, al tiempo que diseñar una respuesta adecuada y ajustada, organizando un conjunto de medidas y recursos personales y materiales que vaya desde lo más ordinario y general a lo más específico.
Es obvio que cierto alumnado requerirá durante un periodo de su escolaridad concreto o a lo largo de todo él, una atención educativa diferente a la ordinaria, medidas educativas específicas, medidas de carácter asistencial, programas específicos que desarrolla el profesorado especialista, y materiales también muy particulares ajustados a su desarrollo. Pero la escuela ya provee recursos y medidas ordinarias para toda la población escolar de las que se beneficia todo el alumnado, también el que presenta dificultades. Es por ello, por lo que en aras del principio de atención a la diversidad y desde una apuesta por la inclusión educativa deben hacerse ordinarias y generalizarse cuantas medidas y programas se dirijan a la prevención, a la detección e intervención temprana, a la diversificación de actividades y tareas, a la flexibilización de los agrupamientos, a la optatividad, a las metodologías favorecedoras de la inclusión, a los programas de refuerzo, a los programas de enriquecimiento cognitivo, a los programas de mejora de los aprendizajes, etc.
De este modo estaremos haciendo una verdadera atención a la diversidad en nuestras aulas y centros, normalizando las diferencias e incluyendo a los más posibles, recurriendo a las especificidades más tarde, si cabe.
Las Instrucciones de 22 de junio de 2015 de la Dirección General de Participación y Equidad especifican y concretan la aplicación de la norma en vigor, a través del "protocolo de actuación para la detección, identificación del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo y organización de la respuesta educativa". Este protocolo viene a dar coherencia a las prácticas que están desarrollándose en este sentido y sobre todo a garantizar la igualdad de oportunidades, a preservar un modelo de educación inclusiva, a aclarar lagunas normativas en todo el proceso educativo del alumnado con n.e.a.e, y, a corresponsabilizar a todo el centro de la atención de este alumnado con n.e.a.e., estableciendo unos criterios uniformes para la asignación de los recursos.
Asesoría de Necesidades Educativas Especiales del CEP Jerez
No hay comentarios