Sólo hay que tener más fe en el jerez
Un empresario riojano brinda a las bodegas un espacio común para la promoción y divulgación de los caldos jerezanos El proyecto enoturístico 'Galería del jerez', impulsado por Roberto Amillo, prevé abrir sus puertas la próxima vendimia
Un regalo de boda desató la pasión de Roberto Amillo por el jerez, en concreto por el Brandy de Jerez. Corría el mes de agosto de 1979 y un nieto del almirante Cervera acertó a regalarle a este empresario riojano con motivo de su enlace matrimonial una botella del brandy 'Almirante', el artículo de mayor valor sentimental para Amillo de las más de 17.000 referencias sobre el espirituoso y los vinos jerezanos que integran su colección.
Amillo reconoce que aquel regalo puede considerarse el embrión de su amor por el jerez, el mismo que le ha llevado a aventurarse en un proyecto enoturístico que puede ser un gran revulsivo para los caldos jerezanos y para la ciudad, una plataforma para su promoción que prevé abrir sus puertas la próxima vendimia bajo el nombre de 'Galería del jerez' en una casa palacio de la plaza Rafael Rivero, a espaldas de la antigua Fundación Teresa Rivero.
La iniciativa impulsada por Amillo, y que ayer se presentó en Jerez ante una nutrida representación del sector bodeguero, no puede equipararse con un museo, sino más bien con un centro de interpretación en el que, junto a la exposición permanente de una parte de su colección y la tienda de venta directa, se realizarán todo tipo de actividades formativas y divulgativas relacionadas con la cultura e historia de los caldos jerezanos, incluidas catas libres 'a la carta' de los vinos y brandies de las bodegas del Marco y un taller en el que se ofrecerá la posibilidad a los visitantes de diseñar sus propios vinos.
"No es un espacio de consumo de vino, un tabanco, ni se servirá comida, es un centro de promoción donde se podrán catar los vinos en pequeñas cantidades de dos a tres centilitros para dar a conocer el jerez", que es "un producto complicado visto desde fuera, un producto difícil y que pocos saben cómo pedir", explicó durante la presentación el coleccionista, quien hizo especial hincapié en la necesidad de crear prescriptores locales, y no sólo turistas, porque "son los que pueden abrir el mercado nacional".
La galería de catas ocupará el patio principal, en el que se instalarán modernos dispensadores con capacidad de hasta ocho botellas que se activan con tarjetas de regalo cargadas con tres catas. Los dispensadores permitirán crear una base de datos con toda la información sobre las preferencias de los visitantes, el origen, edad... El acceso a esta zona será libre y sólo se exigirá registrarse a la entrada.
Para sumarse al proyecto, las bodegas deberán realizar un desembolso inicial de entre 1.000 y 2.000 euros, reembolsable con participación en los beneficios, mientras que la cuota mensual por grifo/botella rondará los 60 euros.
Llama la atención que un empresario riojano sea el que brinde a las bodegas, y sin ánimo de restarles protagonismo, un espacio común en el que agrupar la amplia oferta vinícola del Marco y que sirva de punto de encuentro al sector. Pero Amillo, según explicó el presidente de Fedejerez y del Consejo Regulador del Brandy, Evaristo Babé, acumula muchos años de devoción al jerez en los que se ha curtido en múltiples batallas emprendidas en solitario para compartir su pasión por los vinos y brandies jerezanos, hasta el punto de organizar exposiciones itinerantes en las que el empresario riojano recordó ayer haber echado en falta el apoyo del Consejo y de las bodegas, las que tienen la última palabra para que esta iniciativa privada alcance el éxito.
Para el presidente de las Rutas del Vino y el Brandy de Jerez y director del Consejo Regulador del vino, César Saldaña, la 'Galería del jerez' es "un proyecto muy interesante por lo que puede aportar a la oferta enoturística del Marco, porque no hay nada que se le parezca". Según Saldaña, quien espera que el proyecto se incorpore formalmente a las Rutas, "una pregunta frecuente que nos hacen los visitantes es dónde pueden probar variedad de vinos de Jerez y no sólo los de una bodega y aquí van a poder catarlos y comprarlos en la tienda".
En representación del Ayuntamiento, el delegado de Turismo, Antonio Real, el proyecto de Amillo "se suma a la amplia oferta enoturística de Jerez, por lo que lo felicito por la idea, que seguro tendrá muy buena acogida entre los jerezanos y los visitantes".
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