Vecinos del centro histórico vuelven a patrullar de noche por los botellones
Los afectados por la movida juvenil denuncian que los jueves por la noche son "horrorosos" y piden que la Policía "no avise y sí multe" El lunes se reúnen con el delegado de Seguridad
Llega el jueves y el centro histórico se convierte en una discoteca al aire libre. Coches con la música a todo volumen al lado de una iglesia, botellas de alcohol en los adoquines, vasos medio llenos entre maceteros con geranios y hasta droga frente a casas palaciegas. Este escenario se repite, y cada vez con más presencia de jóvenes, todos los jueves. La situación es tan desesperante para los vecinos de la zona que ayer volvieron a anunciar que patrullarán por la noche para controlar y poder denunciar a la Policía Local los focos más peligrosos.
"La cosa ha ido a peor con el verano, sobre todo los jueves, que son horrorosos. Y son llamativos no sólo por el volumen de personas sino por el tipo de gente, la mayoría son menores de edad", declaró Alejandro González, presidente de la asociación vecinal del casco histórico.
Que el ilegal botellón en la calle se haya hecho 'fuerte' los jueves tiene su motivo: este día "no hay dispositivo especial policial". "Desde junio venimos reclamando la asistencia de la Policía los jueves. Hace un par de semanas me llamó Manuel Cabrales (jefe de la Policía Local) y me dijo que para el jueves pasado estaría el dispositivo. Llegaron las horas cruciales y los vecinos nos dimos cuenta que nos habían engañado", denunció González, quien continuó explicando que "hubo vecinos que llamaron a la Policía y les respondieron que sólo había un coche patrulla que estaba ocupado. ¿Esto es normal? Creo que no". González reconoció que el trabajo de los agentes sí funciona los días que se aplica: "Es efectivo y se nota los viernes y sábados. Si es verdad que no tienen medios, ¿por qué no salen a denunciarlo? De cara al ciudadano los agentes son los que no hacen su trabajo, a pesar de que no tienen culpa".
Justamente ayer el Ayuntamiento informó de que el delegado de Personal y Seguridad, Javier Durá, y mandos de la Policía Local, mantendrán el próximo lunes una reunión con esta asociación vecinal. El encuentro servirá también, según dijo el Ayuntamiento, "para informar del dispositivo policial montado de cara a los jueves y los fines de semana en la plaza San Mateo".
Volviendo a la problemática vecinal, el entorno de San Mateo y San Lucas son los puntos conflictos en estas noches de verano, pero se han vivido situaciones tan extremas como ver a grupos de jóvenes haciendo botellón en el mismo arco del Arroyo. "Era increíble. Allí abajo ya estaban bebiendo, pero es que los grupos se sucedían uno tras otro hasta la plaza del Mercado", apuntó el presidente vecinal. San Mateo y San Lucas son los escenarios problemáticos, pero ¿y las horas? Según informó el portavoz del colectivo vecinal, los momentos 'fuertes' son de dos a cuatro de la madrugada, y después, a partir de las seis hasta las ocho del día. "Hace unos días nos llegaron a decir que al cerrar un local de la zona, un grupo de jóvenes pusieron la música de su coche -aparcado junto a la farmacia de la plaza del Mercado- a todo volumen y comenzaron a sacar sillas y mesas de la playa. Esto también se ha visto en San Lucas", lamentó González.
Cada viernes el centro histórico amanece con suciedad en las fachadas, escombros de viviendas abandonadas en plena calle..., "y con esta imagen dudo que la gente se quiera venir a vivir. ¿No es ése un objetivo de la Mesa del Centro Histórico? Por ahora, cumplirlo está difícil", dijo González, quien añadió que "la mitad de los días de la semana no podemos dormir bien, estamos agotados".
La desesperación ha llegado a tal punto que muchas familias optan por dormir fuera de sus casas durante los fines de semana. "Hay gente que se va a su segunda residencia y otras personas que duermen en las casas de sus padres, de los hermanos... Por eso pedimos una cosa clara, que apliquen la ley antibotellón, es simple", declaró González. Reclaman que en lugar de 'avisar' al joven que bebe en la calle, se le multe. "Ahora mismo el control policial es puramente disuasorio, no de castigo, y así no se erradica el problema de raíz. Si yo aparco el coche en un lugar prohibido, a mí no me avisan con un 'usted lo está haciendo mal', a mí me multan e incluso se lleva el coche la grúa. Bien, ¿por qué no se hace lo mismo con el botellón?", preguntó el representante de la asociación.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por El Centro Inglés
Contenido Patrocinado
Especial