"Hemos sacado al lince ibérico de la extinción segura"

Hace unos días el Zoobotánico de Jerez daba a conocer que habían nacidos dos nuevas crías de lince ibérico en las instalaciones. Se trata de un nuevo éxito del Programa de Conservación 'ex situ' del lince ibérico, siendo el de Jerez el único Zoo de España que participa en este trabajo. "Por fortuna nos hemos acostumbrado a estas noticias, pero hemos conseguido sacar de la extinción segura al lince. Es un programa ejemplo en todo el mundo", declara Íñigo Sánchez, conservador del Zoobotánico de Jerez.

El Programa de Conservación 'ex situ' del lince ibérico, iniciado en el 2002, supone un apoyo a las medidas de conservación de la especie en su hábitat ('in situ') además de un "seguro de vida" en el caso de que la situación de la especie empeorara.

Los objetivos generales de este programa de cría en cautividad son establecer un stock de linces capaz de automantenerse a largo plazo y de producir además un excedente de ejemplares idóneos para su reintroducción. Tiene un doble propósito; asegurar la supervivencia futura de la especie a la vez que de proporcionar animales aptos para reforzar las poblaciones silvestres, incrementar su variabilidad genética o recrear poblaciones extintas.

La cría en cautividad se desarrolla en cuatro grandes centros destinados exclusivamente a este fin: El Acebuche (Doñana), la Olivilla (Jaén), Silves (Algarve) y Granadilla (Cáceres) y el Zoobotánico de Jerez como único centro asociado.

"Al principio de todo se hablaba de iniciar un programa de cría pero no se atrevían a acoger linces, porque después se podían morir y era un fracaso muy grande. Era un tanto polémico. Finalmente, los primeros cachorros que se recogieron decidieron traerlos al zoo, no sólo por la cercanía geográfica, sino por la buena fama que tenía la institución en la cría de especies en cautividad y la implicación en la reproducción de especies autóctonas amenazadas", recuerda Sánchez.

De esta forma, el Zoobotánico participó activamente desde sus inicios, recibiendo los primeros cachorros que se capturaron en el campo para su crianza artificial y coordinando el programa durante varios años. También mantienen una pareja reproductora en el AREA (Área de Reproducción de Especies Amenazadas) y ejemplares a la vista del público, desarrollando gran cantidad de actividades educativas en torno a la especie. Ha sido el primer zoo en el mundo en mostrar esta especie en sus instalaciones y el único en reproducirla en cautividad.

En marzo de 2001, cuando el lince ibérico atravesaba sus peores momentos, con apenas un centenar de animales en libertad y aún se estaba tratando de llegar a un acuerdo entre las administraciones para comenzar el Programa de Cría en Cautividad, un equipo de investigadores de la EBD, dirigidos por Miguel Delibes, encontró en Coto del Rey (Doñana) una camada con cuatro cachorros en la que una de las crías estaba ya muerta y otra en estado crítico. Por acuerdo entre la Junta de Andalucía y el Ministerio de Medio Ambiente se decidió retirarla y confiar su recuperación y crianza al Zoobotánico de Jerez.

Se trataba de una hembra de apenas una semana de edad a la que se llamó 'Esperanza' por cuanto suponía la posibilidad de iniciar el germen de un proyecto de cría para ayudar a recuperar la especie y sería criada con biberones en el zoo.

En 2005 se consiguió el primer éxito del proyecto, con la primera camada de Saliega (uno de los cachorros criados en el Zoobotánico) en el centro de cría de El Acebuche. Desde entonces la población cautiva no ha parado de crecer hasta llegar a mantener una población estable.

Las primeras sueltas de ejemplares en el medio natural se produjeron en 2010 en Guadalmellato (Córdoba). En una década se han liberado casi 300 ejemplares nacidos en cautividad. Entre ellos varios nacidos en el Zoobotánico, lo que ha sido esencial para la recuperación de la especie, permitiendo recuperar poblaciones en lugares en los que se había extinguido, como algunas áreas de Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha o Portugal.

"Está considerado como uno de los proyectos de conservación de especies amenazada más importante del mundo", subraya el conservador del Zoo de Jerez. La población en libertad ha pasado de menos de 100 ejemplares a comienzos de siglo a unos 1.600 en la actualidad, constituyendo uno de los mayores éxitos de conservación que se conocen a nivel mundial.