La alcaldesa no recurrirá el Catastro

El gobierno local, con la alcaldesa, Pilar Sánchez, al frente, no tiene la más mínima intención de recurrir la ponencia de valores de la revisión catastral de Jerez. Y no lo hará porque, según explicaron ayer la regidora jerezana y su mano derecha en el equipo de gobierno, Casto Sánchez, "la ponencia, desde el punto de vista técnico, es correcta" y así lo avalan "los técnicos de este Ayuntamiento, que tienen una larga y reconocida experiencia en materia tributaria".

En la comparecencia pública al término de la junta de gobierno local, en la que no hicieron el menor amago de abordar el asunto por iniciativa propia pese a haber trascendido el contenido de la conversación que mantuvo la alcaldesa con el número 2 del PSOE andaluz, Luis Pizarro, para manifestarle su preocupación por el cariz que está adquiriendo la revisión catastral, Sánchez y Sánchez vincularon la polémica a determinados "intereses" por "confundir" a los ciudadanos en plena campaña electoral.

"Aquí se ha intentado desde el primer momento confundir tres elementos que son absolutamente distintos", aseguró la alcaldesa en alusión a la ponencia de valores, los errores del Catastro y la actuación del Ayuntamiento, que se ciñe el pago de impuestos locales, pero "no hay motivo para preocuparse ni alarmarse, porque vamos a velar por los intereses de los jerezanos", recalcó la regidora.

Sobre la conversación con Pizarro transcrita ayer por este periódico y en la que la alcaldesa y el dirigente del PSOE andaluz calificaron la revisión de "desastre", la regidora jerezana quiso quitar hierro al asunto para circunscribir el contenido de su charla al ámbito privado, que a su juicio, nada tiene que ver con la forma de actuar en público.

Cabe recordar que momentos antes de una rueda de prensa el viernes en la ciudad, Pilar Sánchez le dijo textualmente al segundo de a bordo de los socialistas andaluces que "lo del Catastro me está dando morcilla a mí...", al tiempo que, tras manifestarle su preocupación por los continuos errores aparecidos en torno a la revisión catastral, apuntó a la posibilidad de solicitar que "el expediente se suspenda y se inicie de nuevo la valoración".

Lejos de mostrarse afectada, la alcaldesa se jactó ayer de lo acaecido para señalar que "me voy a reír un poquito porque estas cosas suelen ocurrir y, bueno, hay que tener mucho cuidado con los micrófonos, pero le ha pasado a gente más importante, le ha pasado a José Luis Rodríguez Zapatero y a Bill Clinton", alardeó Sánchez, quien, en cualquier caso, puntualizó que lo de "desastre" no iba referido a la ponencia y que "en conversaciones privadas se utilizan expresiones distintas de las que se emplean oficialmente en rueda de prensa" -lo que es completamente cierto-.

De vuelta a la revisión catastral, Sánchez y Sánchez hicieron hincapié en la "intachable" respuesta del Ayuntamiento, al que no se puede reprochar nada en relación con las medidas adoptadas -bonificación y moderación de la subida del IBI en la presente legislatura-. Las críticas, que avalan miles de jerezanos con sus recursos, no por errores puntuales, sino por desacuerdo con la ponencia, a la que el Ayuntamiento dio el visto bueno con su informe favorable.

Si la ponencia es tan pulcra y correcta como defiende el gobierno local, se preguntan los expertos, hasta del Catastro, que por razones obvias prefieren mantener su anonimato, ¿por qué las construcciones horizontales salen mejor paradas que las verticales en la revisión?, ¿por qué un chalet en Montealto se revaloriza menos que un piso en La Unión o en La Granja? ¿Por qué los adosados, pareados o unifamiliares junto a los campos de golf (Guadabajaque y Montecastillo) tiene más bonificaciones que las viviendas en muchas zonas rurales?. Su respuesta es sencilla: se debe a la "arbitrariedad" en la aplicación de criterios en la ponencia.