¿Conoces el Palo Borracho y el Limpiatubos Llorón? Árboles singulares de Jerez

Los Jardines de Tempul tienen su origen a finales del siglo XIX cuando se construye el depósito que abastecería de agua potable a la ciudad de Jerez. Con tal motivo comenzó el ajardinamiento de los alrededores hasta consolidar lo que se conocería popularmente como los Jardines de Tempul. En 1953 se fundaría sobre este jardín el Parque Zoológico y Jardín Botánico Alberto Durán, conocido hoy en día como Zoobotánico de Jerez.

Estos días se ha conocido que el cedro del Himalaya del Zoo opta a ser el árbol del año en España. ¿Qué otros árboles singulares hay en Jerez?

Almez del Mississipi: se encuentra en el Zoo y es muy escaso en jardines europeos. Es una especie de planta de flores perteneciente a la familia Cannabaceae. Nativa del sur de Norteamérica, principalmente en Texas. Los nativos americanos usaban este árbol como alimento, medicinas, herramientas y combustible.

Limpiatubos llorón: especie originaria de Australia. Llamativo árbol de flores rojas que se encuentra, entre otros puntos de la ciudad, en el parque de El Retiro, en el Mamelón y en la plaza de las Angustias. Tiene unas hojas lanceoladas y al estrujarlas se puede apreciar un olor que recuerda al eucalipto o al mirto. Las flores, de intenso rojo, aparecen reunidas en unas inflorescencias que asemejan un limpiatubos, lo que le da el nombre.

Palo Borracho: su nombre común se debe al aspecto de su tronco espinoso, que al ensancharse en la base, recuerda a la forma de una botella. Recto, espinoso, y ensanchado en la base. Su corteza es arrugada y algo fisurada; verde y lisa en los individuos jóvenes, se torna algo grisácea y se cubre de gruesos aguijones en los ejemplares más añosos. Es una especie muy ornamental, puede utilizarse como planta de jardín. La lana de sus frutos es apropiada para rellenar colchones, almohadas y muebles, y para fabricar salvavidas. De la parte interna de la corteza se extraen largas y resistentes fibras que se utilizan en artesanía.

Árbol del amor: el nombre castellano de "árbol del amor" se debe al color rosa de sus flores y a la forma acorazonada de sus hojas. También se le conoce como "árbol de Judea o de Judas" por su origen. Según cuenta la leyenda Judas Iscariote se suicidó ahorcándose en uno de ellos. Los frutos se utilizaron en medicina popular como astringentes. En algunos sitios se comen las flores tiernas en ensaladas y se escabechan en vinagre, sin embargo el principal uso de este árbol es el ornamental, debido a sus abundantísimas flores en primavera y a su bonito follaje, siempre en buen estado por no sufrir ataque de insectos. En el parque de El Altillo y en el Zoo hay ejemplares.

Pica Pica: el nombre genérico “lagunaria” alude al parecido con Lagunaea, planta que a su vez está dedicada al botánico español Andrés de Laguna. Su nombre vulgar 'pica-pica' alude a que los frutos encierran unos diminutos pelos muy irritantes. Árbol perenne, normalmente de unos 13 metros de altura, con ramas tomentosas, porte piramidal y ramificado desde la base. Tiene la corteza rugosa y de color gris oscuro. Hojas enteras oblongas-lanceoladas y de color verde grisáceo. La floración ocurre a final de primavera con flores rosas de forma acampanada. Los frutos son ovales y cuando maduran son secos y en su interior contiene gran cantidad de pelos irritantes para la piel humana.

Ciprés fúnebre: Estos árboles pueden llegar a medir 25 m de altura. De porte cónico, la guía principal siempre aparece curvada. Presenta una corteza pardusca y agrietada. Las hojas son escamiformes y se disponen imbricadas en cuatro filas en las ramas. Las flores masculinas aparecen reunidas en inflorescencias de color carmín, y las femeninas se reúnen formando conos globosos de color verde azulado, que se tornan marrones en la madurez. En su lugar de origen, Norteamérica, es uno de los principales árboles utilizados para la obtención de madera. Su madera es dura, duradera y aromática. Hay un ejemplar de casi 100 años en los jardines de El Recreo de las Cadenas.

Árbol de las pelucas: según la documentación que se consulte, está considerado árbol o arbusto, ya que suele estar muy ramificado y frecuentemente las ramas brotan cerca de la base. Es caducifolio. No suele sobrepasar los 4 metros de altura, presentando una copa ancha. Presenta un alto valor ornamental debido a las vaporosas inflorescencias que posee, las cuales son causantes del nombre común que se le da a este árbol. Podemos disfrutar de un ejemplar de árbol de las pelucas en los jardines del Zoobotánico