Unos cables paralizan desde hace tres meses la nueva sede de la Seguridad Social en Jerez

El proyecto de la nueva oficina central de la Seguridad Social en Jerez ha vuelto a toparse con un obstáculo en el camino. Las obras de construcción del edificio, que se desarrollan en una parcela de la avenida de la Universidad frente a la nueva Comisaría de Policía, también en construcción, llevan tres meses paralizadas por la aparición en el subsuelo de un cable de Telefónica que impide continuar con los trabajos. El cable en cuestión “no aparece en los planos”, asegura la directora provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Inmaculada Ríos.

La Seguridad Social ya se ha puesto de acuerdo con Telefónica para proceder al desvío del cableado, operación que no ha sido sencilla por la dificultad de contactar con responsables de la compañía de telecomunicaciones y que, según la directora provincial del ente estatal, permitirá reanudar las obras en cuestión de un mes, aproximadamente.

La responsable del INSS llegó incluso a ponerse en contacto con Urbanismo para recabar información sobre el cable y tratar de agilizar los trámites, remitiéndoles desde esta área municipal a la compañía telefónica. Según Rios, se trata de un imprevisto porque los cables no aparecen en los planos de la parcela que la Seguridad Social adquirió a la extinta Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) en 2014.

Las obras del proyecto del edificio que agrupará los servicios del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) y la Unidad de Recaudación Ejecutiva, cuyas oficinas se ubican en la actualidad en las calles Eguilaz y Ancha, comenzaron en septiembre del año pasado y la finalización está prevista para la primera mitad de 2020.

El problema con el cableado retrasará cuatro o cinco meses la ejecución, claro que en una obra que acumula más de una década de demora es algo casi anecdótico. Tras superar las dificultades para entablar contacto con Telefónica, la directora provincial de la Seguridad Social afirma que ya hay una comunicación fluida con la compañía, por lo que confía en cerrar a la mayor brevedad los últimos flecos de la burocracia que encierra cualquier trámite con la Administración pública para el desvío de la canalización.

Telefónica se hará cargo de esta actuación, si bien Ríos indica que está por ver a quién corresponde sufragar los costes del desvío, asunto que está en manos de los servicios jurídicos del Instituto Nacional de la Seguridad Social en Madrid.

La Seguridad Social sacó a licitación el proyecto de ejecución de su nueva oficina integral en Jerez en 2017 con un presupuesto de 10,5 millones de euros, resultando adjudicataria la empresa Seranco, S.A. por importe de 4,5 millones.

Antes de la licitación, el proyecto fue modificado pues, según se recoge en la memoria descriptiva con fecha de julio de 2014, “desde que se convocó el concurso en 2008 han pasado seis años, por lo que se hace necesaria una revisión completa del proyecto”. Entre otras consideraciones, la memoria plantea eliminar un sótano de 1.625 metros cuadrados proyectado para albergar “cinco grandes archivos que, con los nuevos sistemas de almacenamiento digital, se han quedado obsoletos”. Del mismo modo, se propone ajustar las superficies de las plantas sobre rasante con la supresión de “locales requeridos en su día y que ya no son necesarios” .

El proyecto final, cuyas obras se iniciaron en septiembre del año pasado, contempla la construcción de un edificio con una planta sótano con 33 plazas de aparcamiento para los funcionarios, planta baja y dos plantas en altura sobre una parcela de 2.490 metros cuadrados junto al lavadero de coches de la avenida de la Universidad, en el enclave identificado en el Plan General de Ordenación Urbana como ‘Camino del Duende’.

El Instituto Nacional de la Seguridad Social anunció en 2002 su intención de construir unas nuevas oficinas en Jerez para centralizar todos sus servicios y al medio centenar de empleados con los que cuentan el INSS, la TGSS y la Unidad de Recaudación Ejecutiva en la ciudad.

La licencia de construcción llegó al fin en 2010 y por entonces la previsión era que el edificio estuviese listo para finales de 2012, principios de 2013. Al año siguiente, y seis después de la convocatoria del concurso, se procedió a la revisión del proyecto antes reseñada para la salida finalmente a licitación en 2017.